Políticos ya están en la repartija de zoquetes
Fuentes oficiales revelaron ayer que algunos de los vigilantes habrían estado confabulados con el amotinamiento ocurrido el martes último en la Penitenciaría de Tacumbú y que desencadenó el homicidio de siete presos.
Personas de la misma Penitenciaría de Tacumbú señalaron que algunos guardiacárceles habrían estado comprometidos con los amotinados, al destacar que no reaccionaron al pedido de auxilio de sus colegas cuando se iniciaron las acciones para detener la revuelta.
En ese contexto, en una entrevista con ABC Cardinal, la ministra de Justicia, Cecilia Pérez Rivas, no negó la posibilidad de que algunos funcionarios penitenciarios actuaran en complicidad con los grupos criminales que operan en la cárcel, lo que deja en claro la presencia de un esquema de corrupción.
“Eso es fuera de duda. De hecho, yo creo que es parte del esquema que yo sospecho que derivó en todo esto”, recalcó Pérez Rivas.
Luego dijo que “hay cuestiones realmente llamativas que estamos investigando”, y que nunca antes hubo una reacción como la ocurrida el martes solo por el traslado de un reo a otra cárcel.
Pérez indicó que desde hace tiempo vienen trabajando en acciones tendientes a evitar que en la cárcel de
Tacumbú se repita la tragedia ocurrida en la Penitenciaría Regional de San Pedro el 16 de junio de 2019, que dejó un saldo de nueve muertos como consecuencia del choque entre “reclutas” de la banda Primer Comando da Capital (PCC) y el “clan Rotela” por el control mafioso del sitio.
La ministra manifestó que en la rebelión del martes, algunos grupos encontraron la ocasión para vengarse de otros. Hay problemas entre presidiarios, dijo. “Sí, nosotros creemos que hay diferencias internas, porque hay riñas y peleas todo el tiempo. Lo que hacemos es separar y poner en pabellones alejados –a los involucrados– por seguridad. Lo que pasó fue que estos grupos se mezclaron y aprovecharon para hacer ajustes de cuentas en el momento”, aclaró la ministra.
Se le preguntó sobre las denuncias de que hay coimas en la cárcel, y respondió: “Yo sé ese tema de recaudación de los viernes. Partiendo de la base (de que) hay un sistema corrupto y contaminado. Todos los directores saben bien que no hay perdón, se investiga, se comprueba y se sale”. Insistió en que se debe trabajar en la reforma del sistema penitenciario.