Autogestión
A una semana del inicio de las clases en el sector público, cientos de escuelas y colegios están en deplorables condiciones. En la mayoría de los casos es por falta de gestión de la administración de cada institución. Los directores y docentes se excusan en una “lenta respuesta” del Ministerio de Educación y Ciencias (MEC), de la falta de recursos económicos, de la escasez de personal de limpieza, entre otros. Existen directores que viven esperando la asistencia de municipalidades y las gobernaciones, que en muchas ocasiones nunca llega. Este panorama se repite cada año y, por ende, ya debería ser una lección aprendida. Por ejemplo, paredes agrietadas, salones extremadamente sucios, filtración de agua servida, falta de agua potable, ventanas con vidrios rotos, patios con malezas crecidas, techos con goteras, sanitarios deteriorados, sistema eléctrico precario, murallas caídas y muchos otros problemas esperan a los pocos alumnos que optaron por las clases presenciales en las escuelas Silvio Pettirossi y Don Carlos Antonio López, de Luque, así como en la escuela Capitán de Fragata Romualdo Núñez, de Limpio. Ante la falta de respuesta del MEC, los directores de las escuelas y colegios públicos deberían generar estrategias para unir a toda una comunidad educativa: padres, cuerpo docente y alumnos. Con tanta tecnología de comunicación, es fácil organizar reuniones y actividades para coordinar las tareas. En estos momentos la autogestión es el camino para superar esta realidad. Es hora de que los administradores de las escuelas y colegios en malas condiciones edilicias, con ayuda de padres de familia y docentes asuma la responsabilidad de cuidar la institución en todos los aspectos y principalmente en cuanto a infraestructura y salubridad. Es necesario que renueven su entusiasmo y propongan iniciativas para generar un ambiente agradable y confortable para todos, que no esperen “todo” de los organismos del Estado, de los intendentes, gobernadores y del propio ministro de Educación. Ahora están muy ocupados en sus propios intereses particulares, de grupos, partidarios y otros.