Í ” ñ
“La vuelta al mundo en 80 días” de Julio Verne, otra de las joyas de la literatura universal aparecerá mañana en la colección “Best sellers por siempre”, de ABC Color y la editorial El Lector. El libro, que promete una cuota de aventuras y suspenso, costará G. 35.000.
Esta obra de Verne, una de las pocas que no se hallan en el marco de la ciencia ficción, narra la historia de un ciudadano inglés de finales del siglo XIX, Phileas Fogg, quien hace una apuesta: la mitad de su fortuna a que puede dar la vuelta al mundo en el plazo de 80 días. Y parte rumbo a la aventura, acompañado por su mayordomo, el simpático señor Picaporte.
La novela tiene momentos desopilantes en medio de paisajes exóticos y en el trayecto
de un viaje sumamente accidentado utilizando diferentes medios de locomoción.
En suma, nuestros lectores tienen hoy un motivo para adentrarse en la lectura, en la lectura de un libro ideal para quienes aman la buena literatura y, sobre todo, para quienes aman las novelas que contienen una serie de sorpresas página tras página.
En cuanto a los personajes centrales, Verne nos presenta a su Phileas Fogg como un individuo típicamente inglés: calmo, calculador, inconmovible
ante el riesgo, capaz de enfrentarse a todo escollo con serenidad y humor. No en balde, para la versión de la película realizada en 1956 sobre la base de esta novela, el director Michael Anderson eligió a David Niven para el papel.
Y lo acompaña Juan Picaporte, un mayordomo francés algo disparatado, bien intencionado aunque distraído e irreflexivo, pero que también es útil para salvar ciertas situaciones que parecieran insalvables.
Para la mentada película de 1956, Anderson eligió a
Cantinflas, el cómico mexicano que hacía furor en aquellos años, para dicho papel. Y esa realización cinematográfica fue tan exitosa como el libro.
En esta novela, además, el gran Julio Verne nos exhibe una asombrosa erudición respecto a la geografía del mundo entonces conocido: de las particularidades regionales, de sus costumbres exóticas y conductas llamativas. Hasta nos mete en pleno Oeste norteamericano en una batalla con temibles indios siux. Esta es una novela colorida, divertida, arrolladora en la que Verne nos pone una vez más ante su fantástica calidad narrativa.
Esta novela ya ha conmovido a varias generaciones y lo seguirá haciendo.