US$ 12,3 millones en casas de exjerarcas
KABUL, Afganistán (AFP). El Banco Central de Afganistán informó ayer que los talibanes encontraron 12,3 millones de dólares en efectivo y varios lingotes de oro en casas de exresponsables del anterior gobierno, incluido el exvicepresidente Amrullah Saleh, en momentos en que el país atraviesa una escasez de liquidez.
“El dinero recuperado provino de funcionarios de alto rango en el gobierno anterior (...) y de una serie de agencias de seguridad nacional que tenían efectivo y oro en sus hogares”, señaló en un comunicado el Banco
Central.
“El Emirato islámico”, el nombre dado por los tali- banes a Afganistán, transfirió todo el dinero “a las arcas nacionales” en nombre de la “transparencia” de la que se jactan los islamistas, en oposición al anterior régimen cuya corrupción denuncian.
Durante el gobierno del entonces presidente Ashraf Ghani, la corrupción fue endémica y generalizada. Millones de dólares recibidos en concepto de ayudas al país habrían sido desviados. El propio exjefe de Estado está acusado de llevarse consigo millones de dólares cuando huyó hacia Abu Da- bi, algo que ha negado en reiteradas ocasiones. Los talibanes investigan las cuentas bancarias de exaltos funcionarios del gobierno afgano derrocado en busca de eventuales ganancias ilícitas, señalaron el martes dos directivos del sector.
Un mes después de la caída de Kabul, la población afgana continúa preocupada por la situación económica y el temor de que lleguen nuevas prohibiciones que terminen con los derechos adquiridos en los últimos 20 años.
La mayoría de los empleados públicos aún no ha vuelto a trabajar y una gran parte de ellos sufre para sobrevivir ante la falta de salario. Para los que tienen el dinero en el banco, las extracciones fueron limitadas a unos 200 dólares por semana y por persona para evitar un derrumbamiento del sistema bancario.
Privado de las ayudas del Banco Mundial y el fondo Monetario Internacional, y las reservas del Banco Central congeladas por Estados Unidos, el país se enfrenta a una escasez de liquidez.