Inspeccionan la oficina de Schuartzman
Teléfonos celulares, la memoria del circuito cerrado de video y documentos fueron decomisados por la Fiscalía, ayer, de la oficina del empresario Mauricio Daniel Schuartzman Parnes (52), asesinado en la noche del domingo último frente mismo a su casa, sobre la calle San Agustín entre Concordia y Florida del barrio Jara de la capital.
El procedimiento estuvo encabezado por la fiscal Alicia Sapriza, quien señaló que a solo unos pasos de la residencia de la víctima funciona la administración de al menos tres empresas: una inmobiliaria, una agroganadera y una agropecuaria.
Igualmente, la agente del Ministerio Público señaló que por el momento no se puede aventurar en señalar cuál habría sido el móvil del alevoso homicidio. Este hecho fue ejecutado por tres sicarios quienes al llegar al lugar unas tres horas antes, para asegurar el “trabajo”, retuvieron al guardia y a un empleado de la víctima.
“Para poder hablar sobre los motivos del atentado tendríamos que contar con una hipótesis sustentado con buenos elementos probatorios. Es más, en ningún momento Schuartzman dijo a familiares ni allegados que recibió una amenaza de muerte en los días previos”, refirió Sapriza.
Por ahora los investigadores ya cuentan con las imágenes del circuito cerrado de la casa, en las cuales se puede apreciar perfectamente el ataque perpetrado por los asesinos. Si en algún momento se logra, con la ayuda de la tecnología, obtener imágenes nítidas de los pistoleros, las mismas serán compartidas a la ciudadanía para tratar de identificarlos, explicó la fiscala.
Igualmente, ya testificaron algunas personas y ayudaron a identificar las calles por donde transitaron los criminales en la huida.
Mientras, responsables del Sistema 911 confirmaron que las cámaras de seguridad instaladas en aquella zona de la capital prácticamente estaban inservibles por falta de mantenimiento, por lo que no ayudaron para acelerar las pesquisas.
Es más, según los responsables del Sistema 911, en Asunción y Central están distribuidas unas 800 cámaras, de las cuales solo 450 están operativas.
La falta de rubro para el mantenimiento y la nula gestión de los funcionarios del Ministerio del Interior responsables de las gestiones respectivas, son las principales causantes de que queden inservibles esos costosos aparatos, señalaron las fuentes.