Las represas operan por debajo del nivel en Brasil
Las represas hidroeléctricas del sudeste y medio oeste del Brasil ya operan por debajo del nivel previo al apagón, la crisis de hace 19 años, señalan los medios de prensa del vecino país.
Sin lluvias y con alto consumo de electricidad, el nivel de los embalses en el Sudeste y el Medio Oeste alcanzó el nivel más bajo, al menos desde la crisis de 2001, cuando se produjo el mayor racionamiento de la historia de Brasil, dicen. En 2000, el año anterior al apagón, las presas tenían un 20,8% de almacenamiento y, en 2001, ya contaban con programa obligatorio de reducción de energía, un 21,76%, recuerdan.
Este año, hasta el 15 de septiembre, según el último dato del Operador Nacional de Sistema Eléctrico (ONS), el nivel era del 18,23%, indican, y que ese porcentaje debería seguir cayendo hasta noviembre, cuando se pueda romper la barrera del 10%, lo que representa un desafío y un mayor riesgo para el funcionamiento del sistema.
En el mercado, la combinación entre consumo y bajos niveles de embalses ya plantea dudas sobre si el gobierno del vecino país será capaz de equilibrar la oferta y la demanda de energía para evitar un racionamiento, aunque pequeño, en torno al 5%. Algunas centrales hidroeléctricas tienen un nivel de agua por debajo del 12%, como Agua Vermelha, Marimbondo, Nova Ponte, Emborcção e Itumbiara, y juntos representan un tercio del volumen de almacenamiento del sistema Sureste / Medio Oeste, puntualizan.
Hace semanas, el diario O Globo informaba que la mayor central hidroeléctrica de São Paulo ya operaba con un embalse a un nivel por debajo del recomendado.
Añadía ese medio informativo brasileño que dos centrales hidroeléctricas en São Paulo, Ilha Solteira y Três Irmãos estaban a un paso de ser desvinculados del sistema eléctrico de ese Estado “por falta de agua suficiente en sus embalses”.