Clan Caballero Vargas rectificó para ocultar posibles negociados
La diputada Blanca Vargas (ANR, HC) y su esposo, el exintendente de Minga Guazú, Digno Caballero (ANR, HC), forman una lucrativa pareja con amplia visión de negocios, no solo para hacerlos con fondos públicos administrados por ellos mismos, sino también para ocultarlos.
La empresa Dimafre SA está incluida en la declaración jurada presentada en agosto de 2013 por Vargas, con motivo de su primera asunción al cargo de diputada por Alto Paraná y esto no sería muy relevante si no fuera porque dicha empresa se adjudicó con varias decenas de licitaciones de la Municipalidad de Minga Guazú, administrada por su esposo Digno Caballero.
Aquel estuvo dos periodos como intendente mingueño y las adjudicaciones a Dimafre sucedieron entre 2013 y 2019. Dicha compañía seguía figurando en la declaración jurada de Vargas al momento de terminar su primer periodo en 2018. En 2021 rectificó sus DD.JJ., pues ya no figuró ese año su empresa Dimafre SA.
Otro hecho llamativo es que en 2018 la parlamentaria efectuó en total 5 presentaciones, todas con datos similares. La legisladora cartista reportó en dicho año un patrimonio neto de G. 8.115.000.000, supuestamente sin poseer ninguna deuda.
Además, llama la atención que no coinciden varios datos de la pareja, que está casada sin separación de bienes. Por ejemplo, la diputada Blanca Caballero declaró que en 2021 los ingresos mensuales de su cónyuge eran de G. 20.411.230, mientras que un año antes, su marido decía percibir al mes G. 66.928.390.
Hay que destacar que Digno Caballero, justamente por los innumerables cuestionamientos hechos a su administración, que incluye varias denuncias de desvío de fondos que hasta el momento no fueron investigadas por la Fiscalía, perdió la intendencia a manos Diego Amílcar Ríos Llano (Independiente).