Rumores de dimisión del Papa: qué dicen los vaticanistas
El frágil estado de salud del papa Francisco alimenta los rumores sobre una posible dimisión. Especulaciones y preocupaciones. Qué está pasando en la Santa Sede y qué dicen los vaticanistas sobre el líder de la Iglesia Católica.
CIUDAD DEL VATICANO (AFP). Su visita a República Democrática del Congo y a Sudán del Sur, prevista para inicios de julio, fue postergada indefinidamente, y muchos se preguntan si podrá cumplir con su viaje a Canadá, a finales de ese mes, tras vérsele haciendo muecas de dolor durante algunas apariciones públicas.
El Vaticano dice que el viaje a Canadá se mantendrá “hasta nuevo aviso”.
Desde principios de mayo, el papa utiliza una silla de ruedas o un bastón, debilitado por un fuerte dolor en su rodilla derecha.
Estos raros cambios de última hora en la agenda de la Santa Sede reavivaron las preocupaciones sobre la capacidad de Jorge Bergoglio para gobernar e hizo crecer los rumores de una posible dimisión.
Esta teoría “regresa de manera cíclica”, analiza el vaticanista italiano Marco Politi, autor del libro “Francisco, la peste y el Renacimiento”. En 2014, el propio pontífice contribuyó a alimentar la hipótesis, al considerar que Benedicto XVI había “abierto una puerta” al renunciar a su cargo.
“Frenesí mediático”
Algunos expertos matizan la posibilidad de una próxima salida. “En el entorno del Papa, la mayoría no cree mucho en la posibilidad de una dimisión”, dijo una fuente del Vaticano.
“Desde el momento en que se empieza a decir que el Papa está muy enfermo, pueden pasar muchos años: la enfermedad de Juan Pablo II empezó en 1993 y terminó en 2005” , recuerda Alberto Melloni, historiador del cristianismo y secretario de la Fundación de Ciencias Religiosas.
“Son cosas en las que hay ganas de entender, de especular”, lamentando un “desmesurado frenesí mediático en torno al papa y a la Iglesia”.
El estado de salud de Francisco ya había alimentado las especulaciones cuando se sometió a una operación de colon en julio de 2021.
“Bajo Juan Pablo II, el progreso de la enfermedad era muy visible, hubo preguntas durante años” y “también había a menudo noticias falsas”, recuerda el padre Federico Lombardi, antiguo director de la sala de prensa de la Santa Sede.
“Con Benedicto XVI, fue más bien la debilidad de la edad la que progresó y lo llevó a la renuncia, de forma gradual”, añade, refiriéndose al papa emérito.
Consistorio en agosto
En septiembre de 2021, Francisco –que sigue recibiendo a responsables políticos o religiosos cada mañana– había ironizado sobre los rumores. Aún estoy “vivo aunque algunos quieren mi muerte”, dijo en ese momento. Pero tres eventos avivan los rumores, entre ellos el consistorio del 27 de agosto que designará a nuevos cardenales, incluyendo a los futuros electores en caso de cónclave, un momento muy inusual para este evento.
A continuación, el Papa reunirá a los cardenales del mundo en Roma y visitará la tumba de Celestino V, el primer pontífice que dimitió en el siglo XIII, en L’Aquila.
Esta conjunción sin precedentes intriga a la prensa italiana e internacional.
Pero “por ahora, se trata de ser realista y no alarmista”, matiza Marco Politi. Según él, este encuentro podría ser también un simple “momento de discusión general sobre la reforma de la Curia”, el gobierno del Vaticano, oficializada por la entrada en vigor de una nueva “Constitución” a principios de junio.
Otro tema central para Francisco es el Sínodo Mundial de Obispos, una amplia consulta sobre la organización de la Iglesia que finalizará en 2023. Este evento “es casi un miniconcilio: así que parece difícil imaginar que el Papa quiera dejar a medias este gran proyecto que él mismo decidió”, dice Politi, que también señala la dificultad de tener tres papas en el Vaticano.