Cancillería responde a Irán
El Ministerio de Relaciones Exteriores envió una carta a la embajada de la República Islámica de Irán en Uruguay, a modo de respuesta a una nota que el 23 de junio remitió al Paraguay aquel Estado y en la cual trató de sionistas al ministro del Interior Federico González y al jefe de la Secretaría Nacional de Inteligencia, Esteban Aquino, y además los acusó de estar influenciados por EE.UU. por indicar que la tripulación del avión de Emtrasur es sospechosa de terrorismo.
La misiva dirigida por la Cancillería Nacional expresa que las autoridades nacionales reiteran la voluntad de mantener relaciones bilaterales con todos los países, incluyendo Irán, en un marco de respeto a los principios del derecho internacional.
Seguidamente, dice que “La República del Paraguay es un país soberano e independiente desde 1811 y por tanto no acepta ni acata directivas, políticas o enfoques de Gobiernos extranjeros de ningún tipo; por lo que adopta todas las medidas que sean necesarias para precautelar la seguridad del Estado y de sus habitantes, incluyendo a los extranjeros que habitan en nuestro país y en dicho sentido tiene la obligación de investigar cualquier posible hecho antijurídico que llegue a conocimiento de sus autoridades.”
Agrega que por dicho motivo el Paraguay actúa y actuará en el caso referido (el del avión) por la Embajada de la República Islámica de Irán conforme a los principios y disposiciones constitucionales y legales.
Asimismo, dice el texto que lo hecho por Paraguay, de comunicar un hecho sospechoso, ello no debería repercutir en forma alguna en las amistosas relaciones bilaterales entre nuestros países.
“No figuraban iraníes”
Por otra parte, el ministro Federico González, ratificó ayer a ABC que en el listado original de tripulantes de la aeronave de Emtrasur no figuraban iraníes, solo venezolanos.
Manifestó que el avión iraní-venezolano que vino al país en mayo para llevar cigarrillos de Tabesa (propiedad de Horacio Cartes), no llegó a presentar “datos sospechosos o de riesgo” cuando había solicitado el permiso de sobrevuelo y aterrizaje.