Pérdidas en Coop. San Cristóbal son de US$ 18,2 millones según balance
La Coop. San Cristóbal en el ejercicio 2022 perdió G. 54.205 millones, que con los cargos diferidos de G. 79.203 millones el déficit suma en total G. 133.405 millones, US$ 18,2 millones al cambio actual (G. 7.220), según el balance aprobado en la asamblea
La Cooperativa San Cristóbal, que tiene casi 57 años de existencia, utilizando un eufemismo, está en una complicada y compleja posición financiera y patrimonial, tiene una morosidad promedio del 36,61%, pero el grupo de créditos de mayor volumen tiene morosidad del 62%; y, actualmente la entidad tiene escasa posibilidad de otorgamiento de nuevos préstamos y por ello una reducida actividad de operaciones en general, producto de la poca capacidad, señala la Memoria y Balance 2022, aprobado en la asamblea general del pasado domingo.
Todo ello se produjo luego del paso por la institución
durante 17 años de Juan Carlos Ozorio, sobre quien hay denuncias de que autorizaba préstamos sin respaldo (algunos a políticos de su partido) y otras irregularidades; además está siendo procesado por supuesto narcotráfico, por lo cual tuvo que dejar su banca de diputado por ANR.
El informe presentado por el Consejo de Administración anterior señala que la pérdida en el ejercicio 2022 fue G. 54.205 millones, pero con los cargos diferidos del balance que es de G. 79.203 millones la cifra asciende a G. 133.405 millones.
Según expresa la memoria y balance, hubo manipulación
de los resultados de los ejercicios contables de años anteriores, justamente durante la administración de Juan Carlos Ozorio, que dieron resultados patrimoniales positivos, pero luego del saneamiento contable administrativo y financiero han afectado negativamente el patrimonio en el último periodo.
Destaca que los activos en inversión y en tasación de inmuebles fueron registrados muy por encima de los valores reales, además de realizarse gastos superfluos en promoción y marketing, entre otros varios rubros, según se denuncia en la memoria.
También manifiesta que el
salvataje financiero durante la intervención efectuada en la entidad por el Incoop, para mantener operativa a la cooperativa representó un total de G. 12.500 millones (US$ 1,71 millones), con aporte de las cooperativas Universitaria, Nazareth y de la Central de Cooperativas del Área Nacional (Cencopan).
Sin embargo, la administración saliente admite en la memoria que gestionaron por todos lados fuentes de financiamiento para la operatividad de la entidad, así como también que pidieron a cooperativas, bancos, entidades sin fines de lucro, entre otros, sin lograr absolutamente nada. Se explica que el
objetivo del pedido de fondos fue para poder pagar los intereses por depósitos recibidos y cubrir el costo de operación.
“La tan mentada cooperación entre cooperativas estuvo ausente, inclusive con ofrecimientos de garantías con hipoteca, fiducias, pagarés, entre otras”, expresa el informe a la asamblea.
Uno de los cinco transportes de larga distancia en los que fueron acarreadas personas desde el interior para las votaciones en la asamblea de la Coop. San Cristóbal, del grupo ganador que recibió “apoyo” externo, modus operandi que introdujo Juan Carlos Ozorio en la
institución.
“Es indudable que la imagen de la Cooperativa San Cristóbal está en su nivel más bajo de los 56 años de vida institucional. Las múltiples apariciones en primera plana de los medios de comunicación en los últimos 10 meses han causado un daño irreparable. No es fácil captar nuevos socios y que los vigentes efectúen depósitos”, admite la memoria firmada por el presidente saliente, licenciado Óscar Vidal Benítez Salinas y el anterior secretario, doctor Nelson Edgar Valinotti Bañuelos, quienes, con frase de Mahatma Gandhi, alegan haber hecho el esfuerzo total.