Un ‘shock’ de verdad
Treinta años atrás, el 8 de agosto de 1990, 11 días después de asumir el mando, Fujimori ejecutó el ‘shock’ que tanto fustigó en el plan de Vargas Llosa.
EFERNANDO VIVAS
n 1990, los peruanos aprendimos mucho de política. Fue nuestra primera elección republicana en la que perdió un favorito con todos los avales del sistema y ganó un outsider con todas las incertidumbres de la nación.
La propuesta del Fredemo de Mario Vargas Llosa fue popularmente conocida como el ‘shock’. El Apra, que apoyaba a Fujimori, dedicó a sus mejores cuadros de propaganda a exacerbar el pánico al ‘shock’ y difundieron un terrorífico spot con imágenes de holocausto animado pilladas de la película “Pink Floyd the Wall”.
Juan Carlos Hurtado Miller, quien era ingeniero agrario como Fujimori, pero había hecho un máster de gobernabilidad en la Kennedy School de Harvard, sí estaba convencido de que para detener una inflación, el gradualismo era lo mismo que nada. ¿Cómo llegó donde Fujimori? El propio Hurtado Miller me contó que al ‘Chino’ lo conocía desde su juventud, pues ambos estudiaron en la Universidad Agraria. Lo volvió a tener cerca cuando Juan Carlos fue ministro de Agricultura en el segundo gobierno de Belaunde, y enroló a Alberto en su equipo de asesores.
Cuando ganó Fujimori, recibió pronta ayuda de economistas y hombres de gran empresa, que discrepaban abiertamente de los ‘7 samuráis’, como se llamó a algunos economistas que elaboraron un plan sin ‘shock’ para Fujimori (entre ellos estaban Alejandro Toledo, Adolfo Figueroa y Óscar Ugarteche).
Hernando de Soto, quien ya se había distanciado de Vargas Llosa, y Carlos Rodríguez Pastor padre tenían los contactos internacionales de los que los primeros carecían. Se propusieron convencer a Fujimori de hacer un ‘shock’, pues en junio este todavía decía que no lo haría y confiaba en que Japón lo iba a ayudar con préstamos millonarios. No fue fácil convencerlo. Pero lo lograron en una cita cumbre [ver recuadro].
En realidad, Fujimori optó por seguir el plan de De Soto y Rodríguez Pastor, pero quiso que lo desarrollara y ejecutara Hurtado Miller. Se quedó con el programa, pero no con el equipo, aunque más tarde, en 1991, enroló en el MEF a Carlos Boloña, quien era uno de los propuestos por Hernando y Rodríguez Pastor. Antes de tomar esa decisión, le había propuesto a De Soto que fuese su primer ministro, pero Hernando prefirió mantenerse al margen de los cargos políticos. Fujimori optó, entonces, por pedirle a Hurtado Miller que también fuera primer ministro, con lo que lo empoderó para ejecutar el ‘shock’ ante un Gabinete