Lo oculto detrás de una puerta
Una joven renta a través de Airbnb una casa en las afueras de Detroit, pero cuando llega al lugar encuentra que ya hay un hombre ocupándola. Después de algunas dudas iniciales, y tras descubrir que al parecer se trata de una descoordinación del arrendador, la protagonista acepta compartir la casa, no sin la natural desconfianza hacia ese sujeto de apariencia inofensiva, pero desconocido al fin y al cabo.
Con esa simple premisa es que se dispara la tensión en “Bárbaro”. La vivienda donde ocurre se vuelve protagonista: puertas que se abren y se cierran como signo de inseguridad, luces que no funcionan, escaleras que conducen hacia lo incierto. Sus recursos son los típicos de una cinta de horror, muy fieles al género. Y aunque en algunos casos las decisiones de sus personajes pueden parecer demasiado obvias e ingenuas, uno no tarda en entender que la verosimilitud no es lo más importante en la película, sino los efectos que el suspenso y el terror pueden provocar.
Pero, contrariamente a lo que plantea su trailer y sinopsis, no es esta una película que incida metafóricamente en las perversidades del mencionado servicio de alquiler ni mucho menos (de hecho, habría sido interesante que explorara ese aspecto). Antes de la mitad de la cinta, la historia toma un desvío que incluso varía su tono. No abandona el terror puro, pero lo matiza con ciertos toques de humor que terminan confirmando su tendencia hacia cierto absurdo.
Hay otra dimensión, menos lograda y hasta artificiosa, en la que “Bárbaro” se plantea cubrir varias aristas de la violencia contra la mujer: la muchacha independiente moviéndose sola por la ciudad; el abuso que subyace en los sótanos de una sociedad salvaje; o la naturaleza de la denuncia pública en tiempos del #Metoo. Como suele ocurrir cuando se intenta abarcar demasiado, el resultado final termina flaqueando, al menos en ese aspecto. Por lo demás, la dirigida por Zach Cregger es una película lo suficientemente efectiva para generar unos cuantos sustos incluso a los más preparados.