“Creo que habrá un rebote que va a oxigenar un poco el lado político y el lado económico”
— Usted es un optimista terco, suele siempre mirar el vaso medio lleno. ¿Cómo mirar el futuro con entusiasmo?
Yo creo que hay un futuro mejor en lo económico y en lo político. El cambio que viene probablemente sea mucho más centrista, un gobierno más maduro. La cosa no es solo oponerse, sino también aportar.
— Felipe Ortiz de Zevallos dijo hace poco en estas páginas: “El Perú es un país con un estado de ánimo algo bipolar, pero también resiliente. Cuando las cosas van bien, nos imaginamos estar mejor de lo que en realidad estamos. Cuando van mal, creemos que se viene el fin del mundo”.
Por el lado de la economía, la resiliencia de los peruanos es grande. Creo que habrá un rebote que va a oxigenar un poco el lado político y el lado económico. El país felizmente tiene sus recursos: la minería se moverá un poco más y la agroindustria va a seguir fuerte; el turismo está como el eje más afectado, ahí sí va a haber más trabajo para recuperarlo.
— Esta resiliencia viene acompañada de un factor extra. No solo hemos atravesado una larga crisis política y una pandemia feroz,
“El cambio que viene probablemente sea mucho más centrista”.
sino también un fuerte fenómeno migratorio. Como toda migración, ha inf luido. Empezó siendo una inf luencia marginal, rechazada –como les pasó a todos los peruanos migrantes–, pero se han ido integrando.
— ¿La migración de más de un millón de extranjeros en tan poco tiempo ha variado el comportamiento del peruano en algún aspecto en particular?
Ellos han tenido una gran participación en roles como el desarrollo del comercio electrónico. Si no hubiera habido esos cientos de miles de venezolanos acostumbrados a usar moto, no habríamos tenido este crecimiento del delivery, y en la pandemia eran quienes más necesitaban ese trabajo. Desgraciadamente, las noticias que más vemos son las que reflejan lo malo. Veo algo muy positivo en esta migración, es un grupo que se va a integrar cada vez más.