El precio del préstamo gota a gota
Según cifras del Instituto Peruano de Economía (IPE), en el 2021, el primer año de la Ley 31143, norma que propuso topes a las tasas de interés, 580 mil familias recibieron crédito de prestamistas o casas de empeño. De ese informe también se desprende que el 35% de las personas que recurrieron aun préstamo informal recibió amenazas, daño material o daño físicocomo presión para el pago del adeuda. Hoy por hoy, según vemos en reportes y noticias, dicho porcentaje y las técnicas de coerción se han incrementado y recrudecido bajo la modalidad gota a gota. Ya en el 2023, la SBS reportó más de 70 aplicativos de préstamos informales, y más grave aún, según el análisis de LR Data, en los últimos tres años, más de 3,7 millones de personas descargaron dichos aplicativos. Como consecuencia de brindar su información personal, muchas veces reciben préstamos incluso contra su voluntad, cayendo en una red de extorsión.
Mientras esta situación avanza cobrando vidas, empobreciendo a familias y quebrando mypes, tenemos una iniciativa de ley que busca suspender la Ley 31143, que, como ya está demostrado, es una de las causas que ha originado el crecimiento del mercado de préstamos informa les, a puertas de su ingreso en la agenda del pleno del Congreso.
¿Qué deberíamos haber hecho las entidades financieras para cuando la Ley 31143 sea suspendida? ¿Cómo reconectar con los más de 220 mil peruanos que salieron del sistema financiero? En entidades como Caja
Arequipa, sabemos que tendremos la tarea no solo de incluir, si no de reintroducir a familias golpeadas por la informalidad y probablemente con una situación financiera resquebrajada. En ese contexto, revisar el historial crediticio será un aspecto importante más no determinante. Nuestro propósito de inclusión financiera será puesto a prueba e implicará observar el potencial de recuperación de un cliente volviendo a estudiar cada caso, basándonos en el análisis de datos y, sobre todo, observando y acompañando, a través de los analistas de crédito, la resiliencia de los clientes.
Esta práctica será fundamental y deberá estar acompañada de incentivos financieros y, sobre todo, educativos, para dar la bienvenida devuelta a aquellos que salieron y ojalá, pro mover el interés de aquellos que nunca estuvieron y potenciar así nuestro rol de inclusión sostenible en el tiempo. Por otro lado, a la par será necesario un plan mayor para la desactivación de la red informal hoy fortalecida y enraizada en la sociedad, articulando esfuerzos los reguladores y autoridades de seguridad y justicia.
Estamos a puertas de tiempos de nuevos retos, cambios y oportunidades en la la borde inclusión financiera. En pocos meses se inicia el piloto de moneda digital del BCRP que tiene especial interés en usuarios no banca rizados, y se espera que el eco sistema de pagos digitales incentive y sea la ventana para nuevasoportunidades de inclusión y mayor acceso a otros servicios financieros como el ahorro y crédito. Cada miembro del sistema, desde su rol, tenemos la ocasión de contribuir a resarcir el daño producido por el gota a gota y articular alternativas de inclusión social y financiera para más peruanos.
“Cada miembro del sistema tiene la ocasión de ayudar a resarcir el daño del gota a gota y articular alternativas de inclusión social y financiera”.