Presidente Pedro Castillo se victimiza y se lava las manos
El presidente de la República, Pedro Castillo, dio un mensaje a la Nación el último lunes en el cual se victimizó y no aclaró el escándalo por las reuniones clandestinas que ha venido sosteniendo con empresarios, congresistas y ministros en la vivienda del jirón Sarratea, en Breña.
En un paupérrimo discurso, Castillo Terrones indicó que las reuniones oficiales se realizan en Palacio de Gobierno y que las irregulares visitas que recibió en dicha casa fueron de “carácter personal”.
“Las reuniones oficiales únicamente se realizan en Palacio de Gobierno. En mi domicilio solo he recibido visitas de carácter personal. Por tanto, rechazo enérgicamente haber tenido algún tipo de participación en actos irregulares que hayan favorecido a algún interés particular”, manifestó
“En mi domicilio solo he recibido visitas de carácter personal”, aseguró el mandatario.
el jefe de Estado.
Sin embargo, en este punto contradijo lo que horas antes declaró el ministro de Defensa, Juan Carrasco Millones, quien indicó que en las reuniones que llevaban en privado se tocaban temas de Estado.
“Son reuniones normales, cotidianas, que se pueden realizar dentro o fuera de un lugar privado y lo que se trata en esas reuniones, desde mi posición como ministro de Defensa, nosotros manejamos todo el sistema de defensa de la nación y, por lo tanto, debemos conservar la reserva de ese tipo de reuniones”, declaró Carrasco Millones.
En otro momento del mensaje, el mandatario condenó la corrupción e hizo un llamado de atención a quienes piensen traicionar su confianza.
“Condeno de manera firme y deslindo de cualquier acto de corrupción. Toda persona que traiciona mi confianza y se aprovecha del cargo debe ser investigada y sancionada ejemplarmente por la justicia”, dijo el jefe de Estado.
En cuanto a la moción de vacancia por incapacidad moral permanente presentada en su contra por la legisladora Patricia Chirinos, el dignatario no hizo nada más que victimizarse y echarle la culpa a “una minoría de partidos políticos y grupos económicos” que no han aceptado según él que un “campesino, rondero y maestro” dirija el país y promueva cambios estructurales.
“El objetivo de estos grupos es vacar al presidente sin ningún sustento y absoluta irresponsabilidad”, cuestionó.