Al desnudo la Policía
Informe de la ACLU acentúa grave problema de uso de fuerza letal en el cuerpo El número de muertes de civiles a manos de agentes es tres veces mayor a las ocurridas en Nueva York
WASHINGTON - En un informe en el que detalla los hallazgos sobre su investigación en torno a los “abusos graves y rampantes” que comete habitualmente la Policía de Puerto Rico, la American Civil Liberties Union (ACLU) denunció que entre 2010 y 2011 en la Isla ocurrieron, proporcionalmente, tres veces más muertes de civiles a manos de agentes policiales que en la ciudad de Nueva York.
En Nueva York hay dos veces más habitantes que en Puerto Rico.
Los datos de la ACLU se refieren a la aceptación por el Departamento de Justicia de Puerto Rico de que entre 2010 y 2011 dos decenas de ciudadanos murieron a manos de la Policía.
Entre 2007 y 2011, el total de casos debe haber superado los 36, agrega el informe, que debe ponerle mayor presión al Departamento de Justicia de Estados Unidos, que ha estado durante los últimos nueve meses en negociaciones con La Fortaleza sobre una demanda judicial que permitiría regular la reforma de la Policía de Puerto Rico.
En el informe, la ACLU indica que pudo documentar 28 de los casos ocurridos entre 2007 y 2011, basado mayormente en los que fueron reportados por los medios de comunicación. Pero, piensa que el total puede ser mucho mayor a los 36 que se conocen.
MUERTES NO JUSTIFICADAS
El caso más impactante reciente - que quedó grabado en vídeo - fue la ejecución en Humacao a manos de la Policía de Miguel Cáceres Cruz, un estremecedor suceso ocurrido el 11 de agosto de 2007, en el que el agente Javier Pagán Cruz le disparó en cuatro ocasiones, la última vez directo a la cabeza, mientras era sujetado en el pi- so, boca abajo.
“En la mayoría de estos casos, las muertes no estuvieron justificadas, pudieron evitarse y/o no fueron necesarias para proteger la vida de un agente o civil”, indica el informe de la ACLU, la más influyente organización pro derechos civiles en Estados Unidos y cuyas denuncias provocaron la investigación sobre la Policía de Puerto Rico que llevó a cabo la División de Derechos Civiles del Departamento de Justicia federal.
“La ACLU ha documentado casos recientes en los que la Policía mató a tiros a un muchacho desarmado de tan solo 14 años y disparó contra un anciano de 77 años cuando entró en su casa para
entregar y ejecutar una orden de registro”, agrega el informe, que será oficialmente divulgado esta mañana en conferencias de prensa en Washington y San Juan.
Por lo menos ocho de los casos recientes investigados por ACLU ocurrieron después del informe de 2011 de la División de Derechos Civiles de Justicia federal.
En otro contundente informe, que ha puesto contra la pared a la Policía de Puerto Rico, la División de Derechos Civiles de Justicia federal concluyó en septiembre pasado que por el uso excesivo de la fuerza, la supresión del derecho a la libre expresión y registros irrazonables, la Policía de Puerto Rico ha violentado los derechos constitucionales de amplios sectores de la población y creado una crisis de derechos civiles en la Isla.
En enero pasado, la Policía de Puerto Rico estableció nuevas normas sobre cuando un policía puede usar fuerza letal contra civiles.
De acuerdo al protocolo oficial, el policía puede usar fuerza letal solo “cuando razonablemente crea que dicha fuerza es necesaria para proteger al miembro de la policía u otra tercera persona de una amenaza inminente de grave daño corporal o muerte”.
De hecho, en su informe de septiembre pasado, el Departamento de Justicia federal mantuvo que las normas anteriores de la Policía sobre el uso de fuerza letal eran “obsoletas, desorganizadas y omitían estándares legales contemporáneos”.
“ISLA DE LA IMPUNIDAD”
El nuevo informe de 180 páginas de la ACLU, titulado “Isla de Impunidad: Policía de Puerto Rico al margen de la ley”, destaca también el uso excesivo de la fuerza contra los pobres, los negros y las comunidades dominicanas y la alta tasa de casos de violencia doméstica.
También reafirma los casos más co- nocidos de brutalidad policial en contra de estudiantes y trabajadores que realizaban manifestaciones públicas, así como la ausencia de una disciplina adecuada dentro de las filas de la Policía.
“(Puerto Rico) es un lugar en el que ciudadanos estadounidenses e inmigrantes se enfrentan a un terrible abuso permanente a manos de su propia fuerza policial, mientras los gobiernos federal y local permiten que ocurra”, indicó el director ejecutivo de ACLU, el puertorriqueño Anthony Romero.
El informe de la ACLU fue parte de una investigación sobre el terreno que tomó seis meses, pero se basó en ocho años de trabajo de la oficina de ACLU en Puerto Rico, la cual dirige el abogado William Ramírez.
“El gobernador (Luis) Fortuño propuso reformas después del informe del Departamento de Justicia (de Estados Unidos), pero en el mejor de los casos han sido superficiales y casi ninguna ha sido puesta en vigor”, señaló Ramírez.
LA VIOLENCIA DOMÉSTICA
Según la ACLU, la tasa de mujeres que mueren en Puerto Rico a manos de sus compañeros es la más alta en el mundo. Además, establece que solo el 1% de los casos de violación son investigados adecuadamente.
“Las cifras son inquietantes y están subiendo: 107 mujeres fueron asesinadas por sus compañeros íntimos durante el período de cinco años que va de 2007 a 2011”, agrega el informe, al indicar que el pasado año el total ascendió a 30.
En el caso de la violencia sexual, las fuentes oficiales, sostiene ACLU, calculan que solo se denuncia el 16% de las violaciones.
“Muy pocas mujeres están intentando protegerse de sus compañeros abusivos, en parte debido a la falta de confianza en un sistema que no está ofreciendo una protección adecuada a las víctimas”, subraya el informe.