Miles en correcorre de última hora
Diversas razones para acudir ayer a las JIP
DESPUÉS DE una espera de hora y media en la Junta de Inscripción Permanente (JIP) de la calle Tapia de San Juan, Edwin Olivo salió sin estar inscrito para votar. Partiría rumbo a Camuy casi a las 11:00 a.m. a buscar en casa de su padre su certificado de nacimiento original del estado de Nueva York, y pretendía regresar ayer mismo en la tarde para inscribirse. “Es importante”, aseguró Olivo. Más de 10,000 personas abarrotaron ayer las JIP en toda la Isla para asegurar sus posibilidades de votar en noviembre. Había tanta gente que los turnos tardaron horas.
Algunos esperaban tranquilos, otros estallaban en rabia, como José Antonio Febres, quien acudió a la JIP de la calle Hipódromo, en San Juan, para notificar su nueva dirección. “Tú te asomas y ellos (los empleados) están dando chistes ahí”, contó.
Empleados como Joan Rosa aseguraban que daban el máximo para atender a la multitud que llegó el último día disponible para reactivarse, inscribirse y cambiar de dirección.
“La gente deja todo para última hora”, dijo.
Iris Pérez, vecina de Cataño, necesitaba actualizar su estatus electoral, pues no votó en las pasadas elecciones “por el revolú que hay en el país y porque esos políticos no hacen na’ ”.
PLEBISCITO
Héctor González indicó que no vota desde el 2000, pero ahora se animó de cara al plebiscito. “Tenemos una oportunidad de expresar nuestro pensar sobre la relación con Estados Unidos”, acotó.
Otro que buscó reactivarse fue Nelson Yuret, quien señaló que lo hacía a insistencia de su mamá.
“No estoy motivado. Soy de los indecisos. En realidad yo soy de los de Rosselló y, desde que perdió, no es lo mismo”, dijo el hombre, quien piensa votar por Alejandro García Padilla.
“Si mi mamá lo sabe, me mata”, declaró.
Asimismo, Carmen Bermúdez, de 55 años, pretendía reactivarse para votar por primera vez desde que tenía 18 años en 1980.
Mencionó que lo hacía para acompañar a su familia a las urnas porque “somos de la Palma”, pero también en parte porque su madre, fallecida hace poco, le pedía siempre que votara.
“Ahora que no está ella, pues me decido a votar”, declaró.