Menos peligrosos
Texas sigue siendo contendor en su división aunque han perdido fuerza
LA REACCIÓN equivocada para los Vigilantes de Texas sería una sobrerreacción, una corrección en el camino que los saque de la trayectoria que los llevó a dos apariciones en la Serie Mundial en los últimos tres años.
Sí, ha sido una temporada baja dura para los Vigilantes: Ellos no consiguieron a Zack Greinke y James Shields, y Josh Hamil- ton se fue con uno de sus rivales divisionales, y a menos que los Diamondbacks revalúen lo que piden por Justin Upton, ellos tampoco no van a conseguir al jardinero derecho. Sin importarle lo que hagan los Vigilantes entre ahora y el inicio de la temporada 2013, parece ser que Texas no va a tener un equipo tan bueno como parecía en mayo pasado, cuando los Vigilantes lucían mejor que el resto del planeta.
Pero siguen siendo un buen equipo porque tienen mucho pitcheo –Yu Darvish, Matt Harrison, Alexi Ogando y otros–. El estadio de Texas tiende a ser un lugar que crea estrellas ofensivas, de la misma manera que el estadio de Oakland suele elevar al estrellato a los lanzadores. Sin importar como los Vigilantes decidan redondear su alineación, ellos van a anotar la suficiente cantidad de carreras como para ser contendores.
Michael Bourn sigue estando disponible en la agencia libre, al igual que Nick Swisher y Adam LaRoche, y cualquiera de ellos sería una mejoría. Pero cualquiera de esos tres jugadores están atados a turnos de compensación en el sorteo, y los Vigilantes, al igual que muchos otros equipos, están reacios a entregar su turno y, como ha señalado Peter Gammons, el dinero del pote del sorteo que suele estar atado a dicho tur- no.
Probablemente haya un precio en el que Bourn probablemente trabaje para los Vigilantes, pero es probable que sea mucho menos, y por mucho menos años, que lo que quiere el estelar jardinero central. B.J. Upton obtuvo $75.25 millones de parte del viejo equipo de Bourn, los Bravos, y Bourn querría al menos eso y eso podría estar fuera del alcance de los Vigilantes. Algunos de los equipos que uti-
lizan extensos análisis estadísticos (y los Vigilantes podrían caer en esa categoría) están preocupados de si Bourn, que cumplirá 30 años el jueves, podrá mantener a lo largo de un acuerdo multianual, porque él no es un tipo que se embase mucho (porcentaje de embase de .348 en 2012) y gran parte de su juego está basado en la velocidad.
El plan de Texas era ir detrás de Greinke y esperar a ver lo que se desarrollaba con Hamilton, y el hecho de que los Vigilantes fallaron en conseguir a ambos no cambia su nivel de interés en los otros agentes libres disponibles en el mercado a menos que firmen a alguien como Bourn o Swisher en sus términos.
De otro modo, Texas hará contrataciones de poca monta, como firmar a con un contrato de un año; los Vigilantes dependerán de sus propias opciones internas y utilizarán comités en algunas posiciones en su alineación.
Los recursos significativos de los Vigilantes en prospectos y en dinero siguen estando ahí. Quizás los Vigilantes hagan su movida antes de la fecha límite de cambios del 31 de julio, o quizás sean contendores sin haber hecho una gran movida y siguen siendo uno de los equipos con opciones legítimas de conseguir a David Price cuando los Rays cambien al lanzador zurdo; los ejecutivos rivales ven eso como algo inevitable debido a las limitaciones financieras de Tampa Bay.
Los Vigilantes no van a alterar su plan a largo plazo.