Roberto Serrallés
vicepresidente de Destilería Serrallés
LA PALABRA que resume el regalo que ofrecería Roberto Serrallés, vicepresidente de Destilería Serrallés, al pueblo de Puerto Rico se resume en innovación.
“Deseo que todos como pueblo podamos innovar y reinventarnos para que juntos podamos sobrepasar todos los retos que tenemos”, expresó el ejecutivo.
El portavoz del ron puertorriqueño aseguró que nos espera un año lleno retos y que para poder sobre llevarlo, tenemos que cambiar la forma en hacemos las cosas.
“Se necesita la capacidad de poder transformarnos y ver el mundo de forma diferente para salir adelante”, dijo.
Según el representante de la sexta generación de la reconocida familia ponceña, innovar es igual a transformarse, una acción que su familia ha tomado muy en serio desde sus inicios como productores de azúcar.
“Nosotros estamos hoy en la industria de ron, precisamente por eso, por que nos ocupamos siempre en innovar. Así nos pudimos transformar y evolucionar de una industria azu- carera que éramos, a una productora de ron”, explicó.
Una alternativa que surgió, según Serrallés, tras intentar buscar un uso al residuo de mieles que sobraba una vez se procesaba la caña de azúcar.
“Esto fue un escalón gigante para nosotros. Y, a través de los años, hemos procurado continuar con esa innovación y transformación. Siempre hay que pensar fuera de la caja para poder mejorarse como pueblo”, enfatizó.
“Destilería Serrallés lleva en Puerto Rico 147 años y en ese tiempo nos hemos reinventado varias veces”, añadió.
El ejecutivo advirtió que el mundo siempre sigue cambiando. Si las personas no se mueven al ritmo de los cambios, con toda probabilidad, se quedarán atrás, manifestó.
También enfatizó la necesidad de ser creativo en el desarrollo de nuevos productos y procesos que sean innovadores y sustentables.
“En la manera que cada compañía pueda ser más eficiente, de esa misma forma logra apoyar a su industria, a sus empleados y finalmente a Puerto Rico”, puntualizó Serrallés.