INDISPENSABLE
Inspeccionar visualmente todos los sistemas instalados en una propiedad es clave al momento de comprar. No solo le brinda paz mental como comprador, sino que le permite hacer una compra a la segura, conociendo las condiciones de la propiedad o tomando en cuenta las mejoras necesarias para ponerla en óptimas condiciones.
“Eso es la función de un inspector profesional, un elemento importante en cualquier proceso de compraventa de viviendas, pero es más fundamental cuando se trata de propiedades reposeídas”, dijo Mary Ayuso, presidenta de la Asociación Nacional de Inspectores Certificados en Puerto Rico y el Caribe (NACHI, en inglés).
Pero más allá de lo que podría pensarse, la inspección se recomienda no solo para los compradores sino también para los vendedores de propiedades. Ayuso destacó que la Ley 93 del 16 de mayo del 2006 establece que tanto el vendedor como el comprador tienen derecho a hacer una inspección de la propiedad.
“Como inspectora pienso que todo el mundo debe hacer una inspección, incluyendo la banca para que sepa en las condiciones que está su cartera de propiedades. Por otro lado, en el caso de las reposeídas, que muchas veces requieren mejoras, es importante que los compradores sepan qué necesita su propiedad y puedan comprar preparados, sobre todo que conozcan si está vivible”, dijo Ayuso.
Reposeídas son excelentes opciones
Para Ayuso existe una percepción infundada sobre las casas reposeídas. “El concepto que muchos tienen es que están destruidas y aunque puede haber casas así, hay opciones excelentes. Incluso algunas lucen descuidadas o con equipos rotos, pero cuando se evalúan se ve que requieren arreglos menores, algunos incluso cosméticos que no tienen tanto costo o que no son indispensables para garantizar la seguridad de los residentes”, explicó.
La presidenta de NACHI también recomendó no dejarse llevar por comentarios de vecinos cuando se quiere comprar una propiedad reposeída. “Lo importante es buscar orientación profesional. En ocasiones, vecinos bien intencionados pero mal informados, dicen que las propiedades están destruidas o que tienen daños irreparables y cuando se hace la inspección esa no es la realidad. Nos encontramos casas maltratadas pero no con daño irreparable en múltiples ocasiones”, dijo. Ayuso ha escuchado hasta comentarios de que en ciertas casas han tapados las tuberías con cemento y cuando inspeccionan lo que se requiere es comprar nuevos equipos para el baño, un arreglo relativamente simple y no costoso.
“En las inspecciones nos encontramos con todo tipo de situaciones, desde destrucción de puertas y ventanas hasta vandalismo y destrucción total, pero esto último no es frecuente. Lo más común es la falta de equipo, como inodoros, gabinetes de cocina o reemplazo de puertas y ventanas”, explicó destacando que poner una casa reposeída en condiciones habitables puede resultar un proyecto simple y poco costoso en muchos casos.
Ayuso recalcó que aunque la inspección profesional incluirá todos los aspectos visuales, si la propiedad está vacía por más de seis meses debe ser evaluada por un perito electricista certificado. Además si hay que evaluar la estructura, esa labor debe estar a cargo de un ingeniero estructural. “Si está fuera de nuestra competencia recomendamos que se utilicen los profesionales adecuados”, dijo.
La presidenta de NACHI recomienda:
Escoja la propiedad que desea.
Contrate los servicios de un inspector de vivienda certificado.
Tome en cuenta las reparaciones necesarias y los hallazgos de la inspección.
Consulte con un contratista si necesita tener estimados. La inspección no ofrece estimados de costos.
La inspección no debe verse como un gasto. Es una inversión. El costo varía por condiciones como el tamaño de la vivienda, pero típicamente ronda los $350 en cuanto a inspecciones privadas. El informe tarda entre uno a diez días dependiendo de la empresa.
Para contratar un inspector certificado, puede llamar a NACHI al 787-690-0512 o 787-690-0514 o escribir a nachipr@gmail.com. La asociación, que cuenta con más de 200 miembros, está disponible para ofrecer orientación a compradores de propiedades en toda la Isla, incluyendo Vieques y Culebra.