Redescubren la porcelana
Este material, indispensable en las mejores casas en siglos pasados, vuelve con actualidad
Los decoradores vuelven a apostar por esta loza, mezcla compuesta por caolín, feldespato y cuarzo, que nació en China hace 4,000 años e, históricamente, ha sido considerada como un artículo de lujo imprescindible en las mejores mesas.
En la actualidad, la porcelana ha tomado otro rumbo y, pese a seguir siendo un material caro, se ha adaptado a mundos tan diversos como el de la joyería y la alta decoración por sus propiedades de ligereza y dureza.
Para el decorador Ignacio García de Vinuesa, la porcelana en decoración aporta la satisfacción de vivir con un objeto de diseño actual fabricado por artesanos con un material milenario, ya tenga una utilidad (vajillas o lámparas) o sean meramente decorativos.
Y es que, para García de Vinuesa la decoración no es una cuestión cíclica, como se puede pensar, sino que es “evolutiva”.
“La decoración se adapta a los cada vez más rápidos cambios en las formas de vivir y recibir. Lo que sí se da es la recuperación y la puesta en valor selectiva de mobiliario, objetos decorativos y tendencias cromáticas de diferentes épocas, pero nunca cayendo en la mera copia”, ha dicho el decorador.
Ese afán de recuperación de la decoración ha hecho que en los hogares vuelvan a las estante- rias figuritas pasadas de moda o renovadas cabezas de ciervo de porcelana colgadas en las paredes de los hogares más ‘in’.
“En los últimos años las grandes manufacturas de porcelana europeas han colaborado con jóvenes diseñadores y artistas plásticos para que reinterpreten los diseños tradicionales y aporten ideas frescas que devuelvan el interés por este material a las nuevas generaciones”, ha puntalizado García de Vinuesa, para quien la porcelana es también un material muy “versátil” que lo hace “único”.
CÓMODO PARA DECORAR
Esta versatilidad ha hecho que para los decoradores este material se haya convertido en un comodín a utilizar, tanto en ambientes minimalistas como en los barrocos.
“Siempre es divertido descolocar o sorprender, y qué mejor forma de hacerlo que introduciendo bibelots del s. XXI o utilizando una vajilla de Luis XVI”, ha concretado este decorador reconocido internacionalmente.
La antigüedad de estas piezas a las que se refiere García de Vinuesa bien hacen pensar en la excelente calidad del material, pero en la actualidad el nuevo boom de la porcelana se basa en el diseño y también en la calidad.
“Ni los jóvenes diseñadores ni las grandes manufacturas con-