Compran tiempo para retener a Pesquera
El contrato del jefe de la Policía es extendido de manera temporal
LAS NEGOCIACIONES entre el gobernador Alejandro García Padilla y el superintendente de la Policía, Héctor Pesquera, para que este permanezca en su puesto, terminaron anoche con una solución temporera.
El contrato actual de Pesquera será extendido por un periodo corto de tiempo, aún no definido, lo que le permitirá al jefe policiaco ejercer sus funciones mientras mantiene su puesto como jefe de seguridad del Puerto de Miami.
Las negociaciones, en las que estuvo presente el secretario de Justicia, Luis Sánchez Betances, giraron anoche en torno a las cláusulas económicas del nuevo acuerdo.
El tranque entre las partes estriba principalmente en el monto total que devengará el jefe policiaco, el periodo de vigencia del nuevo acuerdo y el estipendio que recibirá si La Fortaleza decide prescindir de sus servicios en algún momento del cuatrienio.
La secretaria de la Gobernación, Ingrid Vila, no precisó cuánto tiempo comprarán con esta gestión, que necesitará el aval del alcalde de Miami, Carlos Giménez, quien todavía no ha sido consultado sobre el asunto.
“Se van a estar haciendo las gestiones para extender el contrato temporeramente... Queremos quitar la presión con el término que tenemos del 31 de marzo”, dijo Vila.
ENMIENDA SOLO EN LA FECHA
Ese día vence el contrato actual de Pesquera, firmado hace un año por el entonces jefe de la Oficina de Gerencia y Presupuesto, Juan Carlos Pavía.
La intención de las partes es que la enmienda al contrato actual esté firmado a más tardar el miércoles, ya que a partir del jueves recesarán las funciones del Gobierno, con motivo de la Semana Santa. La redacción del nuevo contrato se trabaja en el Departamento de Justicia, se informó.
La enmienda solo será en la cláusula de la vigencia. El resto del documento permanecerá intacto hasta tanto no ter- minen las negociaciones, presuntamente adelantadas, y se firme el nuevo acuerdo
Es decir, Pesquera continuará devengando $164,320 como jefe del cuerpo policiaco, el cual es uno de los salarios más altos en el Gabinete del gobernador.
Del mismo modo, continuará la cláusula de reembolsos por los gastos de Pesquera, que pone como tope el pago de $118,779 al condado de Miami-Dade. El gobernador y el propio superintendente han mencionado en el pasado que es muy poco lo que Pesquera ha reclamado por este concepto.
No obstante, fuentes de El Nuevo Día señalan que el condado de Miami-Dade retiene parte del dinero estipulado en esta cláusula como ganancia por los servicios prestados de Pesquera.
Sin la extensión del contrato, el jefe policial tenía que regresar a Miami a principios de abril. Hasta hace dos semanas ese parecía que iba a ser el escenario.
De hecho, la portavoz del Puerto de Miami, Andria Muñiz Amador, señaló que el retorno de Pesquera ha sido confirmado por esa dependencia por lo que se esperaba su retorno a Miami a inicios de abril, como fue acordado inicialmente bajo la pasada administración.
La confirmación presuntamente se debió a que Pesquera estaba molesto con La Fortaleza porque no habían comenzado las gestiones para renovar el contrato, pese a que ya le había comunicado a García Padilla su disposición a permanecer en la jefatura de la Policía tal y como le había pedido el gobernador.
Versiones extraoficiales del Palacio de Santa Catalina, sin embargo, apuntan a que el superintendente hasta mediados de marzo no había sido categórico en su interés de quedarse.
ACCEDE A UN RECORTE SALARIAL
El cambio de parecer de Pesquera ocurrió luego de conocerse públicamente su descontento y La Fortaleza reaccionara contactando a las autoridades en Miami y reiterando la intención de García Padilla de retenerlo en el cargo.
La versión de fuentes cercanas a Pesquera apuntan a que el funcionario accedió a un recorte leve en su salario anual de $164,320 y a la eliminación de la partida de reembolsos.
También se había estipulado que Pes-
quera iba a cobrar directamente del Gobierno y no a través del condado de Miami-Dade como sucede ahora. Pesquera técnicamente sigue siendo empleado de este condado pero ejerce funciones en Puerto Rico en una especie de destaque interestatal.
Una de las exigencias del jefe policiaco para permanecer en el puesto era que no lo inmiscuyan en la política partidista, incluyendo el pedido de favores políticos como ascensos especiales o traslados para oficiales apadrinados. Esto fue aceptado por La Fortaleza pese a la objeción de ciertos legisladores populares que han abogado por la salida del superintendente de la Policía.
Vila dijo anoche a la prensa que esta misma semana continuarán negociando el nuevo acuerdo que, si se concreta, ofrecería una solución permanente al asunto.
De hecho, fuentes de La Fortaleza señalan que ayer había una expectativa real de alcanzar un acuerdo permanente y solucionar de una vez y por todas el asunto de la jefatura policiaca.
NEGOCIACIÓN DE BUENA FE
Aseguró que todas las negociaciones han sido de buena fe y que Pesquera, quien en el pasado dirigió las oficinas del FBI en San Juan y Miami, además de las consideraciones laborales, ha tenido que sopesar asuntos familiares.
Según la secretaria de la Gobernación, García Padilla ha estado a gusto con el trabajo de Pesquera en la Uniformada dado que se ha visto una reducción en la incidencia delictiva según las estadísticas de la propia Uniformada.
“Esto es un asunto principal porque se trata de bajar el crimen... Es un asunto difícil, son varios los elementos de discusión”, señaló Vila.
Pesquera llegó meses después que cerrara el 2011 como el año más violento en la historia del país con más de 1,136 asesinatos.
Sustituyó a Emilio Díaz Colón, quien duró apenas nueve meses en el cargo en medio de un profundo descontento de la población e incluso de los propios miembros de la Policía.