Meditación improvisada
Los músicos se unen para presentar el disco Christian Classics In Jazz
CUANDO LA QUÍMICA fluye, la armonía retribuye.
Para el trompetista Charlie Sepúlveda y el guitarrista Juan Carlos “Kacho” Montalvo, los acordes de su combinación en el disco Christian Classics In Jazz reflejan el agradecimiento espiritual de un par de músicos que invitan a meditar con la esperanza de apelar a gente diversa más allá de las distinciones religiosas.
En el álbum, sin integrar voces, los dos amigos unieron sus respectivos instrumentos para darle un giro jazzístico a canciones cristianas. De pronto, el público tiene la oportunidad de escuchar el Ave María con un toque de blues o Tengo un nuevo amor en un estilo bossa nova.
“Si no hay química entre los músicos, no surge nada. Estos temas fueron hechos original- mente para meditar. Es una música relajante, hasta cierto punto. La puede disfrutar cualquier persona de cualquier denominación cristiana y quien no sea cristiano, porque la música trasciende las divisiones religiosas”, destaca Montalvo, cuyos números favoritos en la producción son María Magdalena y Villancico yaucano porque “pudimos armonizar con distintas alternativas que surgieron de forma espontánea”.
“ES UNA JOYA”
La improvisación fue clave en el álbum y el resultado, según Sepúlveda, proyecta calidad.
“El disco para mí es una joya. Quedó mucho mejor de lo que esperaba. Superó las expectativas de todo el mundo. Kacho es un virtuoso, un guitarrista espectacular... El trompetista (él) no es tan bueno como el guitarrista (ríe). La producción se distingue por la calidad de so- nido y por cómo interpretamos”, expone Sepúlveda.
La admiración es mutua. Para Montalvo, “Charlie es un músico con gran experiencia en el jazz y eso da un espacio de mayor creatividad”.
Complacido con la experiencia, el guitarrista también se expresa alegre cuando recuerda que esta producción discográfica “tiene un fin muy agradable”.
TALENTO PARA AYUDAR
Como feligrés católico de la Parroquia San José de Luquillo, el trompetista explica que decidió trabajar el proyecto con la meta de recaudar fondos para la Casa Sacerdotal Notre Dame en San Juan.
“Se hizo para recoger fondos para donde están los padres retirados. Para mí es bueno porque uno siempre tiene que estar agradecido. Dios le dio el talento a uno y la música se hizo para alabar a Dios, aunque yo no soy el trompetista más religioso del mundo. No tengo mucho dinero, pero puedo ayudar en lo que pueda con mi talento”, concluye.
Christian Classics In Jazz explora el jazz en otros números como Noche de paz, When the Saints Go Marching In, Yo soy el pan de vida y Cerca de ti Señor. Interesados pueden conseguir el disco o más información llamando al número (787) 728-3710.