“Ya estoy fuera de medicamentos”
Testifican sobre los beneficios de la acupuntura
en medicina y, durante años, se especializó en medicina interna, hematología y medicina ocupacional. Fue en 1985 cuando el doctor Carlos Náter conoció el alcance de la acupuntura cuando un colega que practicaba esta modalidad alternativa atendió a una paciente suya con una dolencia en la espalda que no respondía a otros tratamientos.
Tras ver los resultados en su paciente, el galeno decidió tomar unos cursos de acupuntura moderna y certificarse en esta ciencia.
“La acupuntura es un método terapéutico que se originó hace más de 5,000 años en China, pero empezó a coger auge cuando un famoso periodista que acompañaba al presidente Nixon en un viaje a China recibió un tratamiento”, comentó Náter, de 80 años.
Según explicó, para practicar la acupuntura en la Isla hay que estudiar medicina y luego tomar 220 horas de adiestramiento. Posteriormente, el médico debe recertificarse cada tres años con créditos de educación continua.
“El uso principal (de la acupuntura) es quitar el dolor, pero antes hay que tener un diagnóstico y la acupuntura ayuda a corroborarlo”, sostuvo el galeno.
Náter asegura haber visto numerosos beneficios con la acupuntura mientras laboró, durante 17 años, como el médico de una casa farmacéutica en la Isla.
“Durante los diez años que usé allí la acupuntura, atendí a unos 900 emplea- dos y no reporté ninguno al Fondo del Seguro del Estado”, señaló.
Entre los pacientes que atiende se encuentra Pedro Collazo, quien viaja desde Morovis hasta el consultorio de Náter en el área metropolitana para atender su condición de ataxia espinocerebelar, que básicamente consiste en problemas de coordinación.
“Mi neuróloga dice que no hay cura ni tratamiento, pero lo que busco es un alivio y que no progrese más la condición”, dijo el empleado de gobierno.
Mientras se prepara para evaluar a otro paciente, Náter asegura que muchos llegan con un diagnóstico equivocado.
“Aquí el que viene está bien malo”, asegura el galeno quien practica varios tipos de acupuntura (ryodoraku, akabane y la tradicional)
Otro de sus pacientes lo es Luis (seudónimo), de 33 años, quien padece de Enfermedad de Crohn.
Mientras Náter pincha varias partes de su cuerpo, Luis luce relajado en la camilla.
“Cuando llegué, médicamente ya no había nada más que hacer. Esto me ha aliviado el dolor. Ya estoy fuera de medicamentos”, dijo Luis.
Otro paciente de Náter lo es Jorge Torres, de 64 años, un triatleta.
“Tenía problemas de espalda y espasmos musculares y empecé a coger acupuntura y he podido seguir en el deporte. Cada vez que tengo una competencia vengo. Me ayuda a balancear la energía de mi cuerpo”, dijo Torres.