PROTOCOLO BANCARIO
La OCIF y el regulador cooperativo exigen a los bancos adoptar un protocolo de explotación financiera. Este requiere que la institución identifique posibles casos de explotación y lo notifique a la OPPTE, el Departamento de la Familia, la Policía y la Administración del Seguro Social.
Según la OCIF, las actividades más frecuentes que apuntan a explotación financiera incluyen cambios frecuentes de una cuenta de un banco a otro o de una a otra sucursal. Asimismo, cambios significativos en patrones de retiro o transferencias a cuentas de reciente creación.
También puede darse la práctica de que se emitan frecuente- mente cheques al portador o “cash” o que los cheques se cambien a efectivo en lugar de depositarse.
Otro patrón de explotación puede ser el retiro de dinero de cuentas inactivas o retiros frecuentes, particularmente de cajeros automáticos, así como uso constante de tarjetas de débito cuando su dueño no conoce cómo se utilizan. La cancelación de un certificado de depósito o cuenta bancaria, sin razón, también es motivo de alarma.
La OCIF además subraya que otra señal de alerta es que los estados de cuenta se reciban en una dirección distinta a la residencia del envejeciente.