Arnault en la hotelería de lujo
Busca seguir siendo relevante para llegar al consumidor sibarita
El multimillonario francés Bernard Arnault quiere que nos quedemos a pasar la noche y comamos su repostería. Después de haber pasado décadas adquiriendo productos suntuarios que los consumidores pueden beber y usar, el presidente de LVMH Moët Hennessy Louis Vuitton SA compró la semana pasada un hotel cinco estrellas en St. Barths y en junio incorporó un café milanés de varios pisos, acelerando su ofensiva destinada a satisfacer todas las necesidades terrenales de sus clientes.
Entre la ola de gastos de verano, que enmarcó la adquisición del sastre italiano Loro Piana SpA en $2,600 millones, LVMH extiende el imperio de $95,000 millones de Arnault a la hotelería, parte de un salto más grande hacia diversificar su oferta en el sector de lujo.
UNA VISIÓN DE 360°
En tanto los buscan nuevas formas de deleitarse y los “Milenarios” –nacidos entre los años 1980 y comienzos de 2000- se definen más por lo que hacen que por lo que tienen, las marcas de lujo están creciendo más allá de la moda y los accesorios.
Arnault intenta “ser dueño de todo el espectro, tener una visión de 360 grados de lo que está haciendo el cliente, lo que compra, lo que come, dónde se aloja”, dijo Laura Ford, estratega en la firma consultora Futurebrand de Londres.
“Es un paso destinado a seguir siendo relevante para los consumidores que cambian constantemente su apetito de lujo y su definición de lujo”.
La campaña de LVMH en la hotelería va tras los pasos de empresas que van desde Gior-
Baby Boomers
BERNARD ARNAULT gio Armani SpA hasta Gianni Versace SpA en el diseño de hoteles. Roberto Cavalli SpA está agregando cafés, Ermenegildo Zegna SpA está abasteciendo de géneros a los Maserati de Fiat SpA, en tanto Kering SA, propiedad de Gucci, viene mimando a sus clientes con invitaciones a eventos ecuestres. Sumando experiencias, estas empresas pueden “ofrecer algo verdaderamente único y memorable”, dijo Jane Kellock, vicepresidenta primera de moda, belleza y color en Stylus, una empresa de investigación y asesoramiento con sede en Londres.
Apalancar con éxito la tendencia podría contribuir a restablecer el precio de la acción de LVMH. El productor más grande del mundo de artículos de lujo avanzó 1.3 por ciento este año en la bolsa de París, por detrás del propietario de Cartier, Cie. Financiere Richemont SA, y Kering SA, ambos con un aumento de 30 por ciento.