Sin cargos por dejar paquete en el tren
El sospechoso no fue acusado porque el paquete no tenía explosivos
LA FISCALÍA Federal determinó dejar en libertad a un individuo que fue investigado como sospechoso de colocar un paquete que contenía una olla de presión con clavos y que fue abandonado en la estación Bayamón (Estrella del Norte) del Tren Urbano, confirmó el portavoz del Negociado Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés), Moisés Quiñones.
"No radicaron cargos porque en el paquete no había explosivos", afirmó el funcionario federal, tras informar de la liberación del sospechoso.
El hallazgo del paquete se produjo el pasado jueves, pero no fue hasta anoche que la Policía divulgó un informe en la que alertó que la Unidad Anti-Terrorista del Tren arrestó en la entrada de la estación a un individuo al cual se le atribuye haber colocado el artefacto “en una columna de la estación Bayamón”.
La portavoz de prensa del Departamento de Transportación y Obras Públicas (DTOP), Irma Moyeno, detalló que el bolso abandonado “tenía utencilios que se pudieran usar para una bomba casera. Los muchachos dicen que tenía todos los artículos parecidos a lo que se usó para la bomba del (Maratón de) Boston”.
Quiñones fue quien precisó a que la Unidad de Explosivos de la Policía “tomó rayos X al paquete y encontraron una olla de presión y unos clavos o tornillos dentro, pero no habían explosivos”.
Este hallazgo provocó que el jueves fuese cerrada la estación del Tren Urbano para investigar, detalló Moreno.
Explicó que la pesquisa quedó en ma- nos de los federales, debido a que el sistema ferroviario es “un transporte colectivo federal”, aunque es administrado por el DTOP.
Fue con los vídeos captados en la estación del Tren, que la Unidad Anti-Terrorista realizó un boceto del individuo y logró arrestarlo cuando intentaba utilizar el sistema nuevamente a eso de las 5:00 p.m. de ayer, viernes.
Moreno detalló que el individuo intentó entrar con otro bolso. No pudo señalar qué contenía en su interior.
En abril pasado, dos bombas artesanales, hechas en ollas de presión de tamaño pequeño, cargadas de rodamientos, pólvora, clavos y metralla, estallaron en la meta del Maratón de Boston. En el incidente, hubo tres personas muertas y decenas de heridos.