Un nuevo comienzo
Terminó mi año escolar en la Academia San Ignacio lleno de felicidad, logros, emociones y muchas experiencias que marcaron mi vida. Con este fin, llegó el inicio de una nueva vida escolar en una escuela nueva, excepcional y llena de muchos retos. Esta escuela es la Academia María Reina, donde desde pequeña anhelaba estudiar y llevar su uniforme con mucho orgullo. Ya se acercó el gran día donde este sueño se transformaría en una realidad. Y qué realidad más hermosa cuando pude compartir con mis compañeras, conocidas muchas, y otras nuevas, con las que empecé una linda amistad. Carola fue una de las primeras nuevas amigas que tuve la oportunidad de conocer, entre muchas otras que vienen de diversas escuelas. Se siente súper emocionante acercarte a la adolescencia y sentir que ya no eres la niña que necesita que le hagan todo. Una de las cosas que he integrado a mis estudios es el uso constante de la computadora, ya que esta es tremendo complemento en las clases que tomo. Mis clases son muy divertidas. Desde las clásicas: español, inglés, matemáticas, ciencias y sociales, hasta mi clase de jazz. Sí, eso mismo, JAZZ. Pensar todos los días que, en algún momento, tomaré baile como parte de mis clases me hace sentir muy feliz y llena de entusiasmo. Aunque mi verano estuvo muy divertido, pensar en mi escuela nueva y los retos que ella trae me hace sentir que este nuevo comienzo será uno lleno de sorpresas, aventuras y mucho aprendizaje. Desde ya, les digo que aunque es una escuela donde lo académico es muy fuerte, las actividades extracurriculares que esta te ofrece, te mantienen entusiasmada y motivada. Me siento lista para este nuevo reto y tengo la esperanza de lograr mis metas con orgullo y con dedicación. Sé que lo voy a lograr poniendo todo mi esfuerzo, tiempo y dando el máximo y venciendo todos los obstáculos que se presenten en mi camino. Mi consejo a tod@s l@s jóvenes que como yo, comienzan una nueva etapa en sus vidas de estudiante: sean perseverantes y dedicad@s, porque al final todo va a valer la pena, porque vas a conseguir tus metas y sentirte realizad@ en tu vida. Así lograrás sentirte orgullos@ de tus logros y hacer sentir orgullos a tus padres que tanto se han sacrificado por ti. Sigan adelante en sus estudios, no se rindan, no dejen que nada se meta en su camino y les impida continuar en la búsqueda del éxito. Amores,