Dieciocho años huyendo
Desde 1995 se desconoce del paradero de quien presuntamente asesinó a un joven deportista
A LOS 21 años, Daniel Iván Silva Ruiz era un joven caborrojeño con metas, sueños y con un futuro brillante en el deporte del judo.
Pero su trayectoria deportiva, que lo llevó a ganar múltiples trofeos y representar a Puerto Rico en el exterior, se apagó la noche del 3 de septiembre de 1995 cuando el menor de dos hermanos fue vilmente asesinado durante una fiesta de despedida.
El crimen que dejó a una familia y a amigos sumergidos en el dolor, y a un hombre fugitivo que 18 años después del sangriento suceso aún no ha sido capturado por las autoridades.
Yarid Morales Pagán, de 46 años, figura hace casi dos décadas en la lista de los fugitivos más buscados por la Policía tras ser acusado de asesinar a tiros a Silva Ruiz frente al antiguo negocio La Cueva que ubicaba en el barrio Joyuda en Cabo Rojo.
Morales Pagán, quien residía en la urbanización Quinto Centenario en Mayagüez, enfrenta desde agosto de 2001 una orden de arresto del Tribunal de Primera Instancia de Mayagüez y una fianza de $120,000 por el cargo de asesinato en primero grado.
“Desde que surgió el evento esa noche este hombre sigue sin aparecer. Es una persona peligrosa porque en el tiempo que estuvo acá siempre estaba armado y hasta estuvo envuelto en incidentes de tiroteos. Es una persona que tiene que ser capturada”, sostuvo el agente Tomás Cruz, de la División de Homicidios de la comandancia de Mayagüez.
Pero no solo eso. Morales Pagán también se considera peligroso pues se supo que estuvo y hasta podría estar todavía inmerso en el mundo del narcotráfico. Lo que se sabe de este individuo es que antes de este asesinato que se le imputa, este hombre controlaba puntos de drogas en varios sectores de Mayagüez, incluido el sector cercano a su residencia.
LO MATAN POR DEFENDERSE
Fue cerca de las 11:30 de la noche de aquel 3 de septiembre que Silva Ruiz, residente de la urbanización Sierra Linda de Cabo Rojo, perdió la vida presuntamente a manos de Morales Pagán.
La víctima acudió al negocio La Cueva para compartir con unas amistades que le hicieron una fiesta de despedida, ya que al día siguiente Silva Ruiz viajaría a Estados Unidos a representar a Puerto Rico en unas competencias de judo. El lugar estaba abarrotado de jóvenes, entre los cuales estaba el hoy fugitivo, Mo-
rales Pagán, quien acudió con unos amigos.
Según el agente Cruz, la víctima y el alegado agresor no se conocían.
La investigación policiaca reveló que esa noche se suscitó una calurosa discusión entre uno de los amigos de la víctima y Morales Pagán, y se desató una pelea a puños y patadas entre ambos grupos de jóvenes.
Al día de hoy se desconocen las razones que provocaron la discusión, según dijo el agente Cruz, pero lo cierto es que la víctima, Silva Ruiz, salió en defensa de su amigo y comenzó a pelear con Morales Pagán y con otros individuos de su bando.
Como Morales Pagán recibió la peor parte en la pelea, salió furioso del negocio, no sin antes gritarle a Silva Ruiz: “¡No te preocupes, que vengo ya mismo!”
Morales Pagán buscó un revólver, regresó al negocio y comenzó a dispararle al joven deportista frente a sus amigos y demás presentes, según se informó.
“Esa noche Daniel peleó como con 10 a 12 personas. Le dio a todo el mundo, parecía (el actor) Steven Seagal. Ahí Yarid le dijo que iba a regresar y cuando llegó, le descargó el revólver encima al muchacho”, contó el agente Juan Martínez, amigo de la víctima.
Martínez dijo que no presenció los hechos, pero acudió al lugar esa noche y escuchó los relatos de los testigos.
“Supe que cuando Daniel recibió los primeros tiros él seguía de pie, fuerte, pero le siguieron disparando hasta que se desplomó y murió allí. Fíjate, Daniel no era un tipo musculoso, pero en sus 160 libras de peso era fornido, era sólido, creo que por eso no cayó rápido. Fue una noticia fuerte para mí, porque él era como mi hermano”, relató Martínez a El Nuevo Día.
Esa fatal noche, nadie más resultó herido de bala. Morales Pagán huyó del lugar y la Policía sigue sin conocer su paradero.
El agente Cruz sostuvo que los testigos cooperaron con las autoridades identificando a Morales Pagán. La familia del agresor no ha cooperado con la Policía.
FLUYEN POCAS CONFIDENCIAS
Son pocas las confidencias que a través de los años ha recibido la Policía sobre el fugitivo, quien también tiene un hermano que fue procesado criminalmente por un caso de asesinato.
De hecho, el agente Cruz sostuvo que la última información confidencial relacionada al fugitivo es que estaba usando, y podría seguir usando, una identidad falsa, precisamente la de un hermano suyo.
Otra confidencia que llegó hace unos años a las autoridades es que Morales Pagán podría estar detenido en la cárcel La Roca en Nueva York, pero esa información no la han verificado.
“Puede ser que esté allí todavía, pero no se ha podido corroborar. Toda la información que tenemos se ha transmitido a la División de Arrestos Especiales y Extradiciones de la Policía”, dijo el agente Cruz.
Sobre alguna característica en particular que el fugitivo tenga en su cuerpo, como tatuajes, que sirva para ayudar a identificarlo y arrestarlo, el agente Cruz dijo desconocer esos detalles, pues Morales Pagán no había sido fichado por la Policía antes del asesinato que se le imputa.
De hecho, Cruz dijo que aunque Morales Pagán estuvo inmerso en el tráfico de drogas, no tenía antecedentes criminales, y no había sido arrestado ni acusado por ningún otro delito previo a la muerte de Silva Ruiz.
No obstante, el agente hizo un llamado a que cualquier persona que sepa de su paradero, que sepa cualquier tipo de información que ayude a su captura, coopere con la Policía.
“Yo sé que hay personas del sector donde él (Morales Pagán) vivía que pueden aportar información a la Policía de manera confidencial. Queremos que cooperen. Silva Ruiz fue una víctima inocente, un muchacho deportista, no era un muchacho que estuviera en vicios ni nada por el estilo. Incluso esa noche de los hechos no ingirió nada de alcohol, él solo fue a compartir con sus amistades que le tenían una despedida. Era un buen muchacho. Hay que capturar a este individuo (Morales Pagán)”, exhortó el agente Cruz.
Si usted posee información que lleve a la captura de Morales Pagán puede comunicarse con la Policía al (787) 343-2020 o al (787) 793-0457.