Citado por “hostigamiento” a dos ballenas jorobadas
Corredor de jet ski comparecerá hoy ante el DRNA para dar explicaciones
EL HOMBRE que grabó en vídeo el momento en que él y otros tres corredores de motoras acuáticas ( jet skis) acorralaron a dos ballenas jorobadas, en hechos ocurridos este pasado fin de semana, deberá comparecer hoy ante la Unidad Marítima del Cuerpo de Vigilantes del Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA) para dar explicaciones de sus actos.
El Nuevo Día supo ayer que el sujeto, que grabó a las dos ballenas jorobadas en aguas de la playa Crash Boat en Aguadilla, fue citado para las 10:00 a.m. en la oficina de la Unidad Marítima del Cuerpo de Vigilantes del DRNA ubicada en el mencionado pueblo.
La citación, en la que intervendrá personal de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA, por sus siglas en inglés), tiene el fin de que el hombre acepte que fue él quien grabó el vídeo de lo que el DRNA tildó de un caso de “hostigamiento”, definido como cualquier cambio en la conducta de un animal o del animal y su cría.
De hecho, un análisis realizado por biólogos marinos del DRNA confirmó que las dos ballenas jorobadas grabadas en el vídeo eran una madre y su cría, que huían “perseguidas” y con una “pared de ruido” creada por los jet skis. De enero a abril, estos enormes mamíferos marinos llegan a nuestras aguas para reproducirse y parir.
A estos efectos, en la citación de hoy se espera, además, que el hombre ayude a identificar a los otros tres corredores de jet skis que “molestaron” a las ballenas jorobadas, dijo una fuente.
Anteayer, la secretaria del DRNA, Carmen Guerrero, había informado que la pesquisa de este incidente, que se dio a conocer porque el vídeo fue colgado en las redes sociales, y causó indignación, estaba “adelantada”.
COBIJADAS EN LEY
Según Guerrero, las ballenas jorobadas están cobijadas por la Ley de Protección de Mamíferos Marinos, tanto a nivel federal como estatal, y su hostigamiento conlleva una multa de $25,000, una pena de reclusión de un año o ambas penas.
La Ley de Especies en Peligro de Extinción también tiene pertinencia en este caso, ya que el 2 de junio de 1970, la ballena jorobada fue designada como una especie en peligro de extinción e incluida en la lista federal de especies en peligro de extinción. La violación a este estatuto conlleva una multa de $50,000 o un año de cárcel.
Y en tercer lugar, la Ley de Observación de Ballenas, específicamente para ballenas jorobadas, establece que la distancia para observarlas es de 100 metros. Cuando se trata de dos embarcaciones o más, la distancia para observarlas es de 400 metros. Si hay una madre con una cría, las embarcaciones no se pueden acercar.
“Los dueños de estos jet skis violentaron las distancias reglamentarias y prácticamente estaban encima de las ballenas, tratando de cortarles el paso y sin dejar un espacio libre de 180 grados en la dirección en que se mueven las ballenas”, había dicho la secretaria.