Arde Ucrania en una hoguera de hostilidades
Trece muertos tras hacer aparición las armas de fuego
KIEV - La policía ucraniana cercó ayer a los manifestantes en el corazón de las protestas opositoras de la plaza de la Independencia de Kiev (Maidan), tras una jornada en la que murieron 13 personas en los disturbios que estallaron en la capital.
Víktor “Yanukovich se ha convertido en un presidente sangriento”, aseguró ayer el dirigente opositor Vitali Klitschko en un llamamiento a los países democráticos para que intervengan en Ucrania y frenen la violenta confrontación.
Según se acercaba la medianoche, los temidos Berkut, el destacamento antidisturbios, estrechaban el cerco en torno a los miles de manifestantes concentrados en el Euromaidan, bastión de las protestas desde el pasado 21 de noviembre.
“Los extremistas de la oposición han cruzado la línea roja; matan a inocentes en la calles de la capital de Ucrania, vejan a mujeres, queman edificios y automóviles. Y si los disturbios continúan, nos veremos obligados a actuar con firmeza”, rezaba el ultimátum del Servicio de Seguridad y el Ministerio del Interior de Ucrania.
Las fuerzas de seguridad bloquearon los accesos al centro de la ciudad y cerraron el metropolitano, y con la ayu- da de tres camiones de agua la policía comenzó a derribar las barricadas construidas con sacos de nieve y neumáticos en los accesos a la plaza.
La policía instaba por megafonía a las mujeres y los niños a abandonar el Maidan, mientras los manifestantes resistían el embate de los antidisturbios con adoquines, palos, petardos y cohetes artificiales. Como parapeto y para frenar el avance de la policía, los manifestantes formaron una gran muralla de fuego de varios metros de altura al incendiar barricadas, tiendas de campaña y otros objetos inflamables.
Miles de personas siguen congregadas en el corazón del Maidan, cantan el himno nacional, ondean la bandera de su país y corean el “Gloria a Ucrania”, mientras los dirigentes opositores lanzan proclamas desde el escenario.
“Las autoridades planean destruir el Maidan y quieren conservar su futuro a punta de ráfaga de Kalashnikov. Vemos que este régimen ha comenzado a disparar a la gente. De este Maidan no nos retiraremos. No tenemos adónde retroceder”, aseguró Arseni Yatseniuk, dirigente del principal partido opositor (Batkivschina).
Los dos principales dirigentes opositores, Klitschko y Yatseniuk, sólo abandonaron la plaza para reunirse con Yanukovich, al que desde el Maidan habían llamado a replegar a la policía y declarar una tregua para dar una oportunidad al diálogo. Horas antes, cuando estaban a punto de cumplirse tres meses de protestas, las armas de fuego hicieron por vez primera acto de presencia en las calles de Kiev.