Esperando la guagua de la AMA
SIENTO LÁSTIMA cuando veo los rostros de resignación de quienes visitan nuestro país esperando por una guagua que no llega.
Aquellas personas que han visitado Málaga, Madrid o Barcelona recordarán los cartelones colocados en las paradas de autobuses, delineando el horario que refleja la llegada de un autobús cada 15 minutos. No hay razón para que en nuestro país hagamos lo propio, si tomamos la sartén por el mango.
¿Cuál es la colaboración, si alguna, entre el Municipio de San Juan y el Departamento de Turismo en proveer un servicio de transporte a nuestros visitantes mediante “shuttles” especiales cuando el de nuestra Autoridad de Autobuses Metropolitanos no puede con la carga?
No pude obtener información precisa, más la falta de eficiencia en este menester es lo suficiente evidente para pensar que no existe. Un exempleado de Turismo me informó que los taxistas obsta- culizan cualquier esfuerzo que compita con sus habichuelas. Me pregunto, ¿hasta cuándo vamos a permitir que la cola menee al perro cuando es la obligación de nuestro gobierno establecer los criterios que puedan desarrollar al máximo el potencial que representa la industria de turismo en nuestra isla?
Tal vez uno de los servicios más importantes que aprecia un visitante a un determinado país, es el sistema de transporte público. Y si no cumplimos a cabalidad con quienes nos visitan, ¿qué se puede esperar del servicio que se les ofrece a nuestros ciudadanos que aportan al erario para tener una transportación puntual y consistente que les permita cumplir con su trabajo?
Es hora que los sindicatos actúen con la responsabilidad y la consideración que merece nuestro pueblo, pensando más allá de lo que un pequeño grupo de irresponsables pretende imponer en nuestro sistema de transporte.
CUQUI SANTONI
SAN JUAN