Decenas de pasajeros en las horas nocturnas

Ningún vagón iba vacío y había movimiento en todas las estaciones

Ningún vagón vacío, varias decenas de personas haciendo uso del tren y movimiento en todas las estaciones. Ese fue el panorama que encontró El Nuevo Día durante un recorrido que realizó ayer en la noche por diversas estaciones del Tren Urbano (TU), cuyo horario nocturno podría verse reducido en dos horas y media.

Los dos vagones del TU que salieron rumbo a la estación Sagrado Corazón a eso de las 7:30 p.m. tenían cada uno sobre veinte personas en su interior, entre las que había profesionales, estudiantes, obreros, madres con niños y algunos ciclistas.

De regreso, de Sagrado Corazón a la estación de Bayamón, la situación fue similar, ya poco antes de las 8:00 p.m.

Wilfredo Valentín, un usuario del TU que aguardaba en la estación Martínez Nadal, se manifestó en contra de que acaben las operaciones del TU a las 9:00 p.m., en lugar de las 11:30 p.m. que es la hora de cierre actual.

“El problema es el pobre, que es el que necesita el tren. ¿Y si sales tarde del trabajo? Lo más cerca que te lleva a casa es el tren. Yo entiendo que hay un problema de presupuesto. Pero entonces que lo pongan uno cada media hora, con dos vagoncitos. Así todos salimos ganando. Estás tarde, pero llegas a casa”, opinó Valentín, recordando que el TU también ofrece un servicio muy importante en caso de eventos especiales.

“El tren hay gente que lo usa (en horas tardías de la noche). Van cinco a 10 personas por vagón. No es que vaya vacío”, aseguró Valentín, quien alabó el sistema de transfer que le ahorra 75 centavos al usuario si coge alguna guagua de la AMA poco después de hacer uso del TU.