Divididos por Venezuela
WASHINGTON.- Al aprobar un proyecto de ley en el Comité de Relaciones Exteriores del Senado, el Congreso de Estados Unidos avanzó ayer hacia la imposición de sanciones contra funcionarios venezolanos a los que acusa de cometer abusos contra los derechos humanos en la crisis política que sacude el país desde febrero.
El presidente del comité, el demócrata Robert Menéndez, dijo que se trata de “penalidades contundentes” contra miembros del gobierno de Nicolás Maduro por “aterrorizar a grandes segmentos de la población con una impunidad inquebrantable”.
Menéndez es una de las figuras más visibles de un grupo de congresistas demócratas y republicanos que piden que Washington reaccione más fuertemente ante lo que consideran son excesos de las autoridades contra manifestaciones de la oposición.
Mientras, en la Casa Blanca hay una actitud más renuente y su estrategia es la de apoyar con “optimismo cauteloso” el incipiente diálogo político que iniciaron las partes hace dos meses para buscar una salida al conflicto. Éste actualmente está congelado, precisamente por las quejas de la oposición sobre la represión de las manifestaciones. Por ahora las iniciativas legislativas deberán ser consideradas en los plenos de la Cámara de Representantes y el Senado, antes de ser presentadas al presidente Barack Obama.