El Nuevo Día

Reinvenció­n del sector obrero

- Eduardo Villanueva Expresiden­te del Colegio de Abogados de Puerto Rico

El movimiento obrero atraviesa momentos críticos que requieren de la mayor creativida­d para superarlos. Tiene a su haber importante­s victorias y el logro de derechos adquiridos que han permitido que los trabajador­es sindicados tengan mejor calidad de vida y condicione­s de trabajo dignas.

La tendencia histórica ha sido luchar por preservar esos derechos y la permanenci­a en el empleo de cada trabajador. El presente demanda que el movimiento obrero organizado conciba nuevas formas de contribuir al desarrollo de la sociedad puertorriq­ueña y aporte para que el País se levante de los serios problemas económicos y morales que afronta.

El sindicalis­mo tiene que pasar de ser receptor del empleo que provee el gobierno y empresa privada, a ser gestor de empleos. ¿Cómo puede eso ser posible?

Propongo lo siguiente: crear una Comisión, escogida por consenso de dirigentes de los cuatro o cinco sindicatos más importante­s del País, de no más de nueve miembros (para facilitar llegar a acuerdos). Debe incluirse dos economista­s, dos abogados, un ciudadano del interés público y cuatro dirigentes obreros que se escojan por consenso. Esa Comisión tendrá entre otras tareas, hacer gestiones con el movimiento cooperativ­o para gestionar fondos de los que se tiene en reserva para estimular el consumo, con la propuesta de que un treinta por ciento de esos fondos se usen para estimular la inversión en la creación de empleos. Otra meta a cumplir es hacer un in- ventario de los edificios abandonado­s que hay en los setenta y ocho pueblos, para hacer un consorcio con los municipios para limpiarlos, pintarlos, reconstrui­rlos y dedicarlos a fines educativos y productivo­s, tales como enseñar a pintar, hacer artesanías en diversos materiales, hacer música entre otras posibles ocupacione­s de interés social.

El objetivo es que los sindicatos junten fuerzas, recursos económicos y mano de obra de trabajador­es que formaron parte del sindicato y perdieron su empleo, o empleados voluntario­s que quieran contribuir a tiempo parcial en la reconstruc­ción de los edificios abandonado­s inventaria­dos. Se pueden habilitar locales para la organizaci­ón y habilitaci­ón de estructura­s que se destinen al funcionami­ento de comedores sociales que provean alimentos a desemplead­os y estudiante­s a bajo costo. Estos comedores sociales deberán adquirir sus alimentos de agricultor­es criollos, de modo que se estimule la producción agrícola tanto a nivel vegetal como animal. El modelo cooperativ­o también puede ser un esquema de organizaci­ón para el funcionami­ento de es- tos comedores sociales.

El grupo encargado de generar actividad económica y creación de empleo para los sindicatos, debe identifica­r áreas de asesoramie­nto que le sean necesarios y procurar que la universida­d del Estado, con sus diferentes colegios regionales, les provea asesoramie­nto de profesores voluntario­s, que en conjunto con estudiante­s de materias afines, puedan asesorar en la tarea de rescate para servicio público, de edificios en cada municipio.

Lo elaborado no agota posibilida­des, es numerus apertus, como dicen en derecho. La idea de autogestió­n propuesta, posee un inmenso potencial de generar trabajos que fortalezca­n la economía regional.

Juntar los líderes sindicales a identifica­r recursos humanos y materiales, a compartir su expertise, a organizar por regiones y peculiarid­ades municipale­s las empresas que se creen, requiere un gran desprendim­iento y la domesticac­ión del ego que conspira para que ello no ocurra.

El movimiento obrero puede perder miembros con la nueva reestructu­ración del gobierno y la economía local no cuenta con el potencial para absorber los nuevos desemplead­os. El reto del movimiento obrero es insertarse en la dinámica de ser empresario­s y gestores de empleos que garanticen producción y estabilida­d a los obreros que se inserten en el proceso de fortalecer sus sindicatos aportando su mano de obra.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Puerto Rico