María Conchita lo recuerda
La actriz y cantante protagonizó su primera película en Hollywood con Robin Williams hace 30 años
La actriz María Cochita Alonso, quien protagonizó su primera película en Hollywood junto al actor Robin Williams, “Moscow on the Hudson” (1984) recibió la noticia de la muerte de su querido amigo en su casa y el impacto fue tal que no podía reaccionar.
La última vez que la artista cubano-venezolana y la estrella de Hollywood se comunicaron fue hace dos años, pero recordó que él siempre le enviaba tarjetas de Navidad con las fotos de él junto a sus hijos.
“Estaba en la casa y mi pareja (Fernando Bare) me dijo que había escuchado de la muerte de Robin Williams por CNN, y me quedé sin reacción. Él me preguntaba ‘pero no te duele’ y yo seguía paralizada. En ese momento le estaba haciendo la comida a mi mamá en su casa en Miami, y seguí como una ‘zombie’ ”, confesó ayer la artista a El Nuevo Día. María Conchita expresó que, aunque fue una noticia inesperada, no fue sorpresa para ella.
“Es que un ser tan maravilloso como él es demasiado para este mundo. Era un ser puro, ingenuo, tierno, genio, noble, educado. Era un hom- bre que no tenía esa coraza que se necesita para enfrentar este mundo tan loco en que vivimos los artistas. Robin vino de otra galaxia y merece el cielo. Espero que esté en un mundo mejor que le de paz a su espíritu y su alma. Los católicos, y él era católico judío. Pensamos que, cuando uno se quita la vida, no descansará nunca, pero espero que no, porque él no se lo merece… Lo único que él trajo a este mundo fue alegría, porque no he conocido a nadie que haya podido hablar algo negativo sobre Robin Williams. Todos tenemos algo y él tuvo problemas con el alcohol y las drogas, pero eso no lo hace malo”, indicó.
Entiende la también cantante que el comediante se suicidó (en su hogar en California) porque no podía más con sus luchas. “Se fue todavía joven porque se cansó de esa lucha de recaer y levantarse día a día y que llegar a ser un fastidio hasta que no pudo más”. A cada momento los recuerdos de cuando trabajaron juntos afloraron de ese hombre de sonrisa dulce. “Eran un buen compañero, humilde, una superestrella, un gran ser humano que consideraba a todos como iguales. Nunca vi que se pensara mejor que nadie. Como debe ser porque nacemos, morimos, vamos al baño y no hay que estar con prepotencias porque uno es actor. Mi comportamiento es muy parecido la de él, sin llegar a ser la estrella que él fue en Hollywood”, señaló.