El Nuevo Día

“Papá, papá, no la mates”

Ashley Rivera narra el horror que vivió a los cinco años al tratar de evitar que su padre asesinara a su madre

- Sandra Caquías Cruz scaquias@elnuevodia.com Twitter: @scaquiascr­uz

FAJARDO.- Ashley Rivera Santiago apenas tenía cinco años cuando agarró a su padre por la camiseta y le imploró que no matara a su mamá.

La suplica fue ignorada. Nelson Rivera Cruz hirió mortalment­e a machetazos a su esposa, Ada Santiago Aponte, la tarde del 31 de julio de 1998 en la urbanizaci­ón Vevé Calzada, en Fajardo.

Ashley, de 21 años de edad, jamás olvidará los detalles de la violenta escena. “Recuerdo que mi mamá estaba parada frente a una puerta del balcón. Ella quería salir. Yo estaba detrás de ella y mi papá sale del último cuarto con machete en mano”, relató la joven en la vivienda que ahora comparte con su abuelo.

Lo primero que hizo Rivera Cruz fue utilizar el machete para cortar la larga cabellera de la mamá de Ashley, quien recién había perdido un embarazo.

“La comenzó a correr por alrededor de la sala. Ella iba a salir por la puerta de balcón, pero él tenía todo preparado. El ‘screen’ no se podía abrir completo. Uno tenía que maniobrar para salir (por esa puerta)”, describió.

“Recuerdo que al (ella) no poder salir él empezó con el machete a hacer... lo que quería hacer. Yo estaba detrás de él y lo halaba por la camisa. Le decía: papá, papá, no la mates”, narró.

“Ella ya estaba muerta y él seguía con el machete, seguía y seguía. Entonces recuerdo que él me coge y como que me mira. Estaba con el machete en la mano, pero recuerdo que,

“Ella ya estaba muerta y él seguía con el machete (cortándola), seguía y seguía” ASHLEY RIVERA SANTAGO

Hija de Ada Santiago

que Dios me protegió. Dios fue quien me guardó y me protegió. Gracias a él yo estoy viva y de pie”. CONFIESA SU CRIMEN. La joven narra que al verla, su padre la tomó en brazos y la “tiró” en su cuarto. “Llamó al Sistema de Emergencia y dijo: ‘acabé de matar a mi esposa’. Tira el teléfono y se echa a correr. Y ahí me quedé sola. Vi a mi mamá ahí, en el piso, ensangrent­ada. Fue doloroso, fue fuerte”, narró antes de destacar que ofrece ese testimonio para que otros sepan que se pueden superar.

“Lo único que ella hacía era gritar... Ella gritó mucho”, dijo. “Lamentable­mente sucedió, sucedió esta tragedia. Otra familia afectada”, lamentó.

Cuando le dieron la libertad, ¿aquí vinieron de la Junta de Libertad Bajo Palabra para entrevista­rte?

—Aquí no vino nadie.

¿Te escribiero­n para preguntart­e?

—Nada. Nada. Eso fue de sorpresa. Y me enteré por él.

Explicó que su bisabuela recibía todos los años una carta para conocer si autorizaba que lo liberaran, las que respondía en la negativa. Empero, la bisabuela falleció hace dos años y no recibieron más cartas.

¿Qué te parece que esa escena se haya repetido?

—Es bien doloroso... Si él no hubiera salido se hubiera evitado esto. Lo lamento mucho por esa familia y espero que sirva de ejemplo para que (el Gobierno) lo piense mucho antes de soltar a la libre comunidad a estas personas que matan a sus parejas, porque una vez lo hacen lo pueden seguir ha- ciendo.

El pasado miércoles, Rivera Cruz asesinó en Caguas a Nidgie Cintrón Vázquez .

LA COMUNICACI­ÓN CON SU PADRE. Ashley explicó que no visitó a su papá en prisión, pero desde los cinco años mantuviero­n comunicaci­ón por medio de cartas, las que suspendió hace unos tres años. “La corté (la comu- nicación), porque él me habló en un tono un poco agresivo y fuerte en las cartas porque él quería que le contestara rápido”.

Según la joven han sido varias las ocasiones en que su padre ha sido agresivo en sus reclamos de que ella le conteste su cartas y llamadas. ¿Le tienes miedo a tu papá? —No le tengo miedo, pero tuve el temor de que me lo encontrara en la libre comunidad. Que yo no quisiera verlo, ni hablar con él y al rechazarlo que él me fuera hacer daño, pero siempre tuve el deseo de irlo a ver, pero tras las rejas. ¿Irías ahora a verlo a la cárcel? —Ahora no. Yo sé que él no está bien mentalment­e. Quizás después. ¿Qué le dirías? —No lo juzgaría, pero es un alma de salvación y que Dios tenga misericord­ia de él. ¿Lo perdonaría­s? —Yo lo perdoné hace mucho y eso me ayudó a sanar mi interior y seguir adelante.

Ashley estudia trabajo social. Escogió esa profesión, según dijo, “por lo vivido, por mis experienci­as. Quiero servir de apoyo a otras personas”.

 ??  ?? Ashley cuenta que la única ocasión que mencionó a su madre hablando con Rivera Cruz fue cuando éste le dijo que no había podido estar con ella por estar preso, a lo que ella ripostó: “pues lo hubieras pensado antes de haberla matado. Él se puso bien...
Ashley cuenta que la única ocasión que mencionó a su madre hablando con Rivera Cruz fue cuando éste le dijo que no había podido estar con ella por estar preso, a lo que ella ripostó: “pues lo hubieras pensado antes de haberla matado. Él se puso bien...
 ??  ?? Ada Santiago (vestida de payasa) con su hija, Ashley, en brazos.
Ada Santiago (vestida de payasa) con su hija, Ashley, en brazos.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Puerto Rico