Floyd mantiene su invicto
Mayweather Jr. venció anoche a Maidana por decisión unánime 115-112, 116-111 y 116-111
Floyd Mayweather Jr. venció por voto unánime a Marcos Maidana en su revancha de anoche en el MGM Grand Garden Arena de Las Vegas, manteniendo su marca invicta pero luciendo como que el Padre Tiempo finalmente le está pasando factura.
Utilizando su “Money punch”, el recto de derecha en contragolpe, y pasando menos tiempo de espalda a las cuerdas en comparación a la primera pelea, Mayweather ganó por tarjetas de 115-112, 116-111 y 116-111, para mejorar su marca a 47-0, con 26 nocauts.
Pero no consiguió el nocaut que dijo buscaría y pasó gran parte del tiempo corriendo para evitar al rudo pero limitado guerrero argentino.
Luego que anunciaron su victoria, Mayweather dijo que finalmente buscaría hacer la pelea con el filipino Manny Pacquiao.
“Yo no esquivo ni evito a nadie. Voy a hablar con mi equipo. Si la pelea con Pacquiao se presenta, la haremos”, dijo Floyd en entrevista sobre el ring.
Mayweather salió a escabullirse por la periferia del entarimado al sonar la primera campana. También comenzó a agarrar en el mismo primer asalto, una táctica deslucida que repitió a menudo en la reyerta. Maidana intentó cazarlo pero -a diferencia del primer duelo-, no lograba pillarlo contra las cuerdas. “Yo vine a pelear, como siempre. Si a los jueces le gusta ver a correlones como Floyd, pues bien”, dijo Maidana (35-5, 31 nocauts).
Ya para el segundo, Floyd había descifrado al Chino y trazado su estrategia para el resto del combate. Navegaba en reversa la periferia, pegaba la derecha en contragolpe y abrazaba cuando Maidana lograba acercarse.
Al final del tercero Maidana pegó su mejor mano, una derecha a la cabeza que hizo tambalear a Mayweather. Justo entonces sonó la campana.
Mayweather seguía aturdido al inicio del cuarto y recibió varios golpes. Pero abrazó, logró recuperarse y reestableció sus tácticas. Maidana le pegó sólido en varias ocasiones adicionales durante el duelo, pero nunca lo pudo herir como al final del tercero.
En el cuatro Floyd retomó el centro del ring y con el 1-2 se llevó la vuelta. Cuando Chino embestía, él agarraba.
Maidana perdió un punto en el octavo por tácticas rudas con el codo. Otra controversia se desató en ese round cuando, luego que dos derechas los sacudieran, Floyd agarró a Maidana y luego se quejó de que el argentino le mordió el guante izquierdo. La pausa decretada para resolver la polémica le vino muy bien al estadounidense.