Gozan los abuelitos en el día de su festividad
Varias asistentes manifiestan la alegría que sienten de contar con sus nietos y biznietos
Carmen Santana, de 62 años, habla de sus 20 nietos y cinco biznietos riendo a carcajadas. La mujer residente en Juncos disfruta alcahuetearlos y afirma que para ella los hijos de sus hijos representan un motivo de alegría tan grande que son capaces de disipar cualquier momento de aflicción.
Santana fue una de las miles de personas que asistieron ayer a la novena edición del Día Nacional del Abuelo, que se celebró en el Coliseo Roberto Clemente, en Hato Rey, con una amplia oferta de actividades para toda la familia.
“Es una cosa bien bella. Cuando más triste uno está, llegan y me dicen ‘bizcabuela’, y lo que hacemos es jugar, y se acaba la tristeza”, dijo Santana a este medio.
Abuelos y abuelas de diversas zonas de la Isla disfruta- ron junto a sus familias de música en vivo durante la actividad. Algunos cantaban y bailaban con entusiasmo en el medio del coliseo, mientras otros recorrían las mesas de los auspiciadores para recoger literatura, artículos promocionales, comestibles o para saludar a personajes vestidos como “El Chavo del Ocho”.
A Marta Rodríguez González, de 77 años y vecina de Hato Rey, le tocó bailar con un “hula hoop” a instancias de los payasos del Circo Nacional de Puerto Rico, luego de ver cómo su hijo Audeliz Camacho, de 46 años, y su nieta Jennyeliz Camacho Figueroa, de 20, hicieron la misma coreografía.
“Es muy divertido ver la gente, están cantando, bailando”, comentó Rodríguez González mientras los payasos observaban y curioseaban entre la familia con trucos y bromas.
Camacho Figueroa, una entre cuatro nietos de Rodríguez González, se expresó complacida de acompañar a su abuela, a quien describió como una experta cocinera de arroz con gandules. “(Estoy) sumamente feliz”, dijo la veinteañera. “No todos tenemos la oportunidad de compartir con los abuelos”.