LOS BONISTAS PIDEN QUE SE REESTRUCTURE
El BGF reconoce que acreedores quieren que se reformen varias corporaciones públicas
Mientras algunos inversionistas en Wall Street intentan empujar al gobierno a una reestructuración operacional de las corporaciones públicas insolventes, la administración del gobernador Alejandro García Padilla está dando paso a algunas de las reformas.
Varios informes, como uno publicado por la agencia de noticias Reuters, sostienen que estas exigencias de los inversionistas fueron manifestadas en la reunión del lunes sobre la reestructuración de la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE).
La pretención de los inversionistas pareció provocar ayer un sabor amargo al menos en el presidente de la Cámara de Representante, Jaime Perelló, quien en principio apoya la reestructuración de las corporaciones públicas, pero rechaza la presión de Wall Street.
“Nosotros en la cámara no estamos trabajando por los bonistas. A mí no me dicta la política pública un bonista. Estamos trabajando por mejorar la economía y mantener los servicios del gobierno”, dijo Perelló.
El presidente del Senado, Eduardo Bhatia, por su parte, parecía abrazar la idea de reestructuración de toda corporación pública insolvente.
“Es una forma de modernizar. Una gran cantidad de las corporaciones tienen estructuras arcaicas. Esto debe ser una gran oportunidad para modernizar al gobierno”, expresó Bhatia.
El propio gobierno ya contempla algunas de esas reestructuraciones con la idea de evitar los constantes sobregiros presupuestarios que terminan afectando la estabilidad del Banco Gubernamental de Fomento (BGF) y el fondo general, que es, en esencia, la principal alcancía del gobierno.
Por el momento, no se sabe con precisión cuáles son las corporaciones públicas que están en la mirilla de los tenedores de los bonos. Bhatia, no obstante, tenía algunas en mente como la Universidad de Puerto Rico y la Autoridad de Puertos.
La presidenta del BGF, Melba Acosta, explicó que el hecho de que haya bonistas impulsado reestructuraciones no implica consenso o una exigencia concertada en Wall Street.
“Todos estos comentarios tienen sus intereses particulares. Cada bonista tiene sus particularidades. Esto no quiere decir que se van a hacer las cosas como quieren algunos (de los inversionistas)”, expresó Acosta en una entrevista telefónica desde Nueva York.
Actualmente, la AEE está bajo una reestructuración que surge a raíz
de las exigencias de inversionistas. La Autoridad de Carreteras y Transporte (ACT), por su parte, tendrá que pasar por un proceso similar por exigencia legislativa como parte de la aprobación del alza en el arbitrio al petróleo y sus productos derivados.
Acosta admitió ayer que la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados (AAA) también podría entrar en un proceso de cambios operacionales aunque, aclaró, que la situación fiscal de esta corporación pública es mucho más sólida que la de la AEE y la ACT. “En todo el gobierno hay tela para cortar”, añadió.
EL DICTAMEN REAL.
Pero más allá de las reestructuraciones, las exigencias de Wall Street que parecían preocuparle al Ejecutivo eran las relacionadas a las condiciones detrás de la próxima emisión de $2,900 millones de bonos de la Autoridad para el Financiamiento de la Infraestructura (AFI).
Con este préstamo, el gobierno pretende saldar la deuda que tiene la ACT con el BGF, lo que ayudaría a estabilizar las finanzas del Banco. Para repagar esta emisión de bonos se legisló un aumento de 68% en el arbitrio del petróleo y sus productos derivados. Esta medida, que ha sido dura-
MELBA ACOSTA
mente criticada, sufrió una serie de cambios que, según el Ejecutivo, complican o impiden ir al mercado a vender los bonos.
El lunes, la casa acreditadora Moody’s Investors Service se hacía eco del equipo económico del gobernador García Padilla al destacar las deficiencias en la legislación.
Entre las críticas hechas públicamente a la medida está que se impusiera un tope al interés que podrá pagar el gobierno por los bonos, la eliminación del ajuste por inflación del arbitrio que comúnmente es conocido como la “crudita” y los errores en torno a la fecha de vigencia para el alza tributaria.
SIGUE “CRUDO” EL ARBITRIO.
La advertencia de Moody’s no parecía resonar ayer en los miembros de la Legislatura, cuerpo que parecía inclinarse a no hacer cambios mayores al proyecto por el costo político que implica.
Fuentes de este diario afirmaron, además, que el proceso de la aprobación de la “crudita” dejó resentimientos entre algunos miembros de la mayoría popular en la Legislatura, por lo que el tema de las enmiendas resulta extremadamente espinoso en este momento.
“Tenemos que mirar las condiciones del mercado con la caída de los precios del petróleo. Puerto Rico no vive aislado de todo esto. En la medida que podamos ir lo más pronto posible tendremos mejores condiciones”
Presidenta del Banco Gubernamental de Fomento
El proceso, sin embargo, no ha cerrado del todo el diálogo entre el equipo del gobernador y los legisladores populares. Ayer, tanto Perelló como la presidenta del BGF afirmaron, por separado, que se encuentran conversando para empezar a trazar ideas que permitan lograr las enmiendas necesarias para mejorar las condiciones de la emisión de bonos. Bhatia, por su parte, alegó desconocer si hay conversaciones sobre el tema al momento puesto que el asunto lo está trabajando el presidente de la Comisión de Hacienda del Senado, José Nadal Po
wer.
UN MERCADO CAMBIANTE.
El problema es que mientras aquí se logra dirimir el asunto, los mercados de valores cambian rápidamente ante la drástica caída en los precios del petróleo.
Ayer, Acosta admitía que esta caída en los precios podría alterar el escenario en que Puerto Rico vendería los bonos. “Puerto Rico no vive aislado de todo esto. En la medida que podamos ir lo más pronto posible tendremos mejores condiciones”, señaló Acosta, al afirmar que la aprobación de la crudita fue un paso importante en el proceso, pero que quedan cosas que afinar.