Pequeños “Reyes” de la sinfonía
El Concierto de Reyes de la Orquesta Sinfónica de Puerto Rico es una experiencia enriquecedora para una nueva generación
Desde hace más de veinte años, el maestro Roselín Pabón, ahora director emérito de la Orquesta Sinfónica de Puerto Rico (OSPR), tuvo la afortunada idea de comenzar lo que se ha convertido en una tradición esperada con ilusión por el público puertorriqueño: el Concierto de Reyes de la OSPR. En sus orígenes, una presentación de la ópera de Menotti,
Amahl y los visitantes nocturnos, pocos años después se transformó en un concierto sinfónico muy especial, que
presenta los talentos jóvenes, algunos muy, muy jóvenes, que comienzan a destacarse tanto en la música de arte como en la música tradicional puertorriqueña.
El domingo en la tarde se celebró en la Sala de Festivales del Centro de Bellas Artes de Santurce el Concierto de Reyes de la OSPR de esta temporada, dirigido por el maestro Pabón.
La primera parte comenzó con un precoz director de orquesta de tan sólo 6 años, Ignacio Carvajal Sánchez, quien con sorprendente aplomo dirigió desde el podio la Marcha Im
perial del compositor John Williams. Acto seguido la arpista Ana Pilar Escudero, de 6 años, interpretó la canción tradicional Palomita blanca y
Fiesta, de G. Barber, junto a la orquesta dirigida por Pabón. Las hermanas Sofía y Claudia Corral interpretaron el
Allegro del Concierto en re menor para
dos violines de J.S. Bach. La sección concluyó con una impresionante interpretación del Allegro del Concierto núm. 3 en do menor para piano y or
questa de Beethoven, a cargo del joven pianista de 17 años Bryan Ojeda, estudiante de la Escuela Libre de Música de San Juan Ernesto Ramos Antonini.
La segunda parte del programa se dedicó a la música autóctona puertorriqueña y contó con la participación del Coro de la Escuela Libre de Música de San Juan, dirigido por Ana Rosario, y la Rondalla de Humacao, que dirige el maestro Jorge Camacho. Muy destacada fue la participación de la cuatrista de 7 años Angélica Zeppenfeldt Cruz en un Popurrí de seis y
aguinaldos, así como la de los niños trovadores Enrique Ayala Morales e Iralix Tirado Negrón, ambos de 11 años y de la escuela Cuna de Trovadores de Comerío. El conjunto especial de la Rondalla de Humacao interpretó un arreglo de Love is Blue y el conjunto de güiros compuesto por 30 niños y un solista interpretaron la danza Mi güiro. Otro talento fue el cantante Zeem Alexander Toribio, de 9 años, en el Cántico de Noel de Adam. La plena Ponte en pie, composición y arreglo del joven cuatrista Luis Sanz fue interpretada por él junto a su hermana Lizvette en la guitarra y voces, con el acompañamiento de la OSPR. Todos se unieron para la pieza final,
Los magos de Oriente. Los comentarios del maestro Pabón a lo largo de la velada añadieron un toque muy ameno y educativo al concierto. Un hermoso regalo de los niños talentosos de nuestro suelo y de la OSPR para el pueblo de Puerto Rico. Enhorabuena.