Simposio para Julia de Burgos
La poeta es la figura literaria que se levanta con mayor proyección internacional y mayor ímpetu popular en la historia de Puerto Rico
Un “simposio” es, de acuerdo al diccionario, una conferencia o reunión donde se discute determinado tema. Platón ambientó uno, celebrado hace más de dos mil años, en un banquete. Y es que, para los interesados en un tema, la reunión de expertos que exponen toma la forma de banquete. El Simposio que celebraremos en la Universidad de Puerto Rico en Humacao del 4 al 6 de febrero de 2015, será, pues, como un banquete platónico. Algo así, muy próximo, como un festival.
¿Y por qué dedicarle a Julia de Burgos un simposio?
Cualquiera que haya estado atento a las actividades que se han celebrado en Puerto Rico durante el último año se habrá percatado de que se han celebrado centenares de actividades dedicadas a Julia en todas partes del país. Desde antes del inicio del centenario de Julia de Burgos, nacida el 17 de febrero de 1914, en el Municipio de Carolina, una explosión de eventos generados de manera espontánea por una multitud de puertorriqueños dominó los calendarios de actividades en Puerto Rico, como no veíamos que ocurriera desde el sesquicentenario de Eugenio María de Hostos de 1989. La explosión de actividades ha tenido eco allende los mares, ya sea en la hermana República Domnicana o en Cuba, ya sea España donde se ha hecho una edición en dos tomos de su obra, simposios y espectáculos musicales, ya sea en diversas ciudades de Estados Unidos.
Y es que el fervor por Julia no es nuevo. Julia gozó en vida de una extraordinaria aceptación y reconocimiento que la proclamaba novia de las multitudes. Sus primer libro fue motivo de elogios entusiastas de parte de la crítica más reputada, dentro y fuera de Puerto Rico, y su primerísima calidad fue señalada por figuras tan cenitales como Pablo Neruda, Juan Ramón Jiménez y Juan Bosh. Su obra fue premiada, tanto como poeta como por su periodismo en la ciudad de Nueva York. El fervor siempre viene acompañado de pasiones menos benignas, de modo que a los costados del elogio se tejió la telaraña de una crítica mordaz que censuró, fundamental- mente, su manera de vivir sus amores.
Julia fue, desde sus primeros versos, una defensora del nacionalismo albizuista, defensora de la República española atacada por el fascismo de Hitler y Mussolini, defensora de los pueblos de América aplastados por dictaduras sangrientas, y defensora de la mujer aplastada por el machismo rústico de la época. En cuanto a su mi- litancia política, que no se limitó a la pluma y la palabra, Julia debió estar en mira de los guardianes de la colonia. Caída en una calle de Nueva York a los 39 años, su dramática muerte, tiñó su vida con los colores de una desgracia que se interpretó, románticamente, como una simple pena de amores. Dramáticamente tristes fueron los versos del desamor, como jubilosos los versos del amor, y vi- brantes los versos de denuncia y reclamo de libertades. A pesar de ello, Julia es la figura literaria que se levanta con mayor proyección internacional y más fuerte ímpetu popular en la historia de Puerto Rico.
El Simposio que se celebrará en la Universidad, recinto de Humacao, acopla la crítica literaria, los recitales, las artes plásticas y musicales, y el teatro. Por eso consideramos al Simposio todo un festival. El miércoles 4 de febrero, a las dos de la tarde, Idalia Pérez Garay dará vida a Julia encarnándola a viva voz para contarnos su vida, mientras Zoraida Santiago nos interpreta sus versos con todo su poder melodioso. Esa noche, el Museo Casa Roig abrirá una exposición de pinturas realizadas por el pintor español José Sánchez Darro, que nos regala además su presencia. El jueves tendremos la apertura oficial del Simposio con la participación, en las palabras inaugurales, de Mercedes López Baralt. El jueves 5 y viernes 6, en tres sesiones concurrentes, se ofrecerán cerca de 40 interpretaciones de la obra de Julia, y varias plenarias, es decir, sesiones especiales. Una de ellas lo será la deseada y esperada presentación de un libro que recoge por primera vez el famoso epistolario entre Julia y su hermana Consuelo, presentación que estará a cargo, precisamente, de las Burgos. En la noche, un recital en La Casona del pueblo de Humacao.
Todas las actividades son de entrada libre. La UPRH otorgará incluso certificados de participación a los maestros, como créditos de Educación Continua.
Julia renacerá en el Recinto de Humacao. Y tendremos la oportunidad de llamarla, entre todos, lo que siempre deseó ser: ¡POETA!