LOS FONDOS SE AGOTAN EN JULIO
A menos que cambie el panorama fiscal, para esa fecha el Gobierno no podrá cumplir sus compromisos, reveló el secretario de Hacienda, Juan Zaragoza. Mientras, Standard & Poor’s vuelve a degradar los bonos del ELA
El Gobierno se podría quedar sin dinero para funcionar en julio si el panorama fiscal continúa sin cambios positivos por los próximos meses, afirmó ayer el secretario de Hacienda, Juan Zaragoza.
Hay dos factores principales conspirando en contra de mantener a flote el gobierno. El primero consiste en las deficiencias presupuestarias en este año fiscal. Zaragoza afirmó que hasta marzo los recaudos estaban $152 millones por debajo de lo proyectado. A esto hay que sumarle el sobregasto de las agencias gubernamentales, cuyo monto alegó desconocer el funcionario.
El presidente de la Comisión de Hacienda de la Cámara de Representantes, Rafael “Tatito” Hernández, estima que el déficit total de este año fiscal ronda los $300 millones. “En mi mente no está que el gobierno cierre de nuevo así que hay que resolver el problema paso a paso”, indicó.
Debido al déficit, las proyecciones de flujo de efectivo de Hacienda proponen que el Gobierno no tendrá los $400 millones que necesita para hacer el último pago de las Notas de Anticipación de Impuestos (TRANs, por sus siglas en inglés).
Los TRANs, en esencia, son préstamos que anualmente toma el gobierno para poder tener el dinero suficiente al 1 de julio, cuando inicia el año fiscal, periodo en que los recaudos son más lentos.
La determinación que tome esta administración sobre el posible cierre dependerá, en parte, de los recaudos que se alcancen con la amnistía contributiva cuya vigencia termina a finales de junio. Los estimados iniciales apuntaban a que la amnistía podía recaudar hasta unos $160 millones.
También influirá el manejo de las deficiencias en las agencias del gobierno central y el arresto de fondos que pueda hacer la Oficina de Gerencia y Presupuesto (OGP). Ayer, el director ejecutivo de esta agencia no estuvo disponible para entrevista.
SIN CRÉDITO NO HAY DINERO. El segundo factor que contribuye al posible cierre es la falta de liquidez del Banco Gubernamental de Fomento (BGF). Para finales de marzo, esta instrumentalidad, que provee finan- ciamiento al Gobierno, tenía $1,118 millones de liquidez neta. A esa suma se le restan los $500 millones que el BGF debe mantener como línea de crédito en casos de emergencia y el repago de unos préstamos que tiene pendiente para estos meses finales del año fiscal.
En síntesis, según Zaragoza, el BGF en la actualidad no tiene el dinero suficiente para cubrir las necesidades gubernamentales en lo que se pueden negociar las condiciones de emisión de los nuevos TRANs que permitirían que el Gobierno opere luego del 1 de julio.
“Mucha gente no tiene clara la interrelación que hay entre el BGF, Hacienda y el resto de los componentes económicos... Al inicio de cada año fiscal el dinero lo ponen el BGF y los TRANs. Es una cadena. Sin esto... en el dominó esto es capicú”, dijo Zaragoza usando la jerga típica del tradicional juego en la que una ficha gana por cual-
quiera de los dos brazos del juego.
ADVERTENCIA DEL BGF. El miércoles, la Junta de Gobierno del BGF precisamente advertía de la posibilidad del cierre si no se aprueba la reforma contributiva propuesta por el gobernador Alejandro García Padilla.
Zaragoza explicó que una de las salidas al problema comienza precisamente con la aprobación de ese nuevo Código de Rentas Internas.
En esencia, esa reforma es necesaria para presentar el presupuesto. Del mismo modo, el presupuesto es importante para lograr la emisión de bonos con la que se busca refinanciar la deuda de la Autoridad de Carreteras y Transportación (ACT). A su vez, el refinanciamiento es necesario para mejorar la liquidez del BGF de modo que el gobierno pueda seguir operando con normalidad. “Son elementos en cadena. Si no se actúa ahora el desenlace final puede ser el cierre”, dijo Zaragoza. UN ASUNTO DE
ARITMÉTICA. El economista Elías Gutié
rrez estimó que si el Gobierno no logra emitir los bonos que usan como fuente de repago el impuesto al petróleo crudo y
“Al inicio de cada año fiscal el dinero lo pone el BGF y los TRANs. Es una cadena. Sin esto... en el dominó esto es capicú”
JUAN ZARAGOZA
Secretario de Hacienda
“El shock sicológico (del cierre) sería devastador tanto para la inversión en Puerto Rico como para la misma gente”
ELÍAS GUTIÉRREZ
Economista
sus productos derivados (popularmente conocido como la crudita), ese cierre que contempla el BGF pasará en algún momento del próximo año fiscal 2016.
“Es una situación muy complicada. Al problema de liquidez del Gobierno añádele la congelación de los pagos a los sistemas de retiro. Además tienes a la Autoridad (de Energía Eléctrica) en grandes aprietos y tienes otro montón de problemas fiscales en otras agencias. ¿Cómo uno puede pensar que un aparato tan grande como el Gobierno pueda mantenerse, sin dinero, operando como de costumbre? En algún momento llegan las consecuencias”, dijo Gutiérrez.
El economista afirmó que el problema mayor es la negación de algunos políticos que ignoran los números y que entienden que se pueden evitar las decisiones dolorosas al momento de atender el escenario fiscal.
UN GOLPE ENORME A LA ECONOMÍA. El cierre del gobierno tendría un impacto profundo en la economía, advirtió Gutiérrez. “Peor que en el 2006”, dijo el economista al hacer referencia al tranque político y económico que llevó al entonces gobernador Aníbal Acevedo Vilá a cerrar algunas agencias del Gobierno ante una insuficiencia de fondos.
“Además el ‘shock’ sicológico (de la paralización en el sector público) sería devastador tanto para la inversión en Puerto Rico como para la misma gente”, dijo el economista. El BGF coincide con esta apreciación. En una carta enviada al gobernador, esta instrumentalidad advierte que un cierre, parcial o total, del gobierno tendría “un impacto devastador” en la economía que este año entró en su noveno año de depresión.