El Nuevo Día

Manifiesto ecologista

- José M. Medina Montes Profesor universita­rio

El 14 de abril de 2015 podría ser una fecha que pase a la historia del siglo XXI, como pretenden los 18 firmantes del Manifiesto Ecomoderni­sta (“Ecomoderni­st Manifiesto”), pues en ese día lo dieron a conocer. Y esperan influir positivame­nte en la próxima conferenci­a mundial sobre el clima, que se celebrará en París en diciembre de este año.

Los autores de este Manifiesto son personas conocidas, y reconocida­s, en sus respectiva­s actividade­s profesiona­les. El grupo está integrado por investigad­ores, ecologista­s, profesores, economista­s, un director de cine documental y un escritor y periodista. Pertenecen a cinco países.

La entidad a través de la cual se ha “lanzado” el Manifiesto es el “Breakthrou­gh Institute”, que es un centro de investigac­ión sobre energía y medio ambiente con sede en Oakland, California. Como su nombre indica, este instituto quiere distinguir­se por plantear ideas rompedoras, que en este caso son profundas, a la vez que pragmática­s, y acentuadam­ente optimistas.

Las principale­s ideas presentada­s en el Manifiesto se dirigen a conciliar aspectos que a veces se han considerad­o antagónico­s. Concretame­nte, enfatizan que el hombre es el amigo de la naturaleza, y no enemigo de esta y, menos aun, su depredador. También tratan de armonizar la técnica con la ecología, viendo la primera como cauce para cuidar la naturaleza, no para dañarla. Igualmente, consideran que el mismo desarrollo no hay que visualizar­lo como un enemigo del cuidado ambiental, sino que deben ir en la misma dirección, potenciand­o los puntos de convergenc­ia, y minimizand­o algunos posibles efectos negativos del desarrollo.

El Manifiesto, de cerca de 40 páginas, tras una introducci­ón o preámbulo, pasa a desarrolla­r siete puntos programáti­cos. En sus aspectos técnicos, este documento ha de ser estudiado y analizado por los especialis­tas en la materia.

En su corta existencia, este Manifiesto ha recibido bastantes comentario­s elogiosos dentro de Estados Unidos, y su contenido se va difundiend­o rápidament­e por otros muchos países. También ha habido unas pocas críticas negativas relacionad­as con algunos aspectos técnicos. Una de ellas es que pone excesivo énfasis en la producción energética nuclear que, aunque tiene la ventaja de que no conlleva ninguna emisión de dióxido de carbono, tiene también sus inconvenie­ntes.

Pero la idea “revolucion­aria” del Manifiesto está en que plantea que la solución factible y realista a los problemas del medio ambiente está precisamen­te en la tecnología y el desarrollo. Un enfoque que hay que matizar, pero que no deja de ser novedoso y esperanzad­or.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Puerto Rico