Alcaldes temen que el BGF use su dinero
La Junta del CRIM reclama al banco que cree un fideicomiso que asegure los fondos municipales
La Junta de Gobierno del Centro de Recaudación de Ingresos Municipales (CRIM) solicitó al Banco Gubernamental de Fomento (BGF) que cree un fideicomiso que protegería los fondos que esa institución recibe de los municipios.
Con esta petición los alcaldes buscan una “garantía” para evitar que el dinero que el CRIM les deposita en el BGF sea utilizado para otros fines, explicó el presidente de la Junta, el alcalde Maunabo, Jorge L. Márquez. ”El fideicomiso aseguraría los fondos de los municipios”, indicó.
Según la Junta del CRIM, al no tener un fideicomiso, los cerca de $600 millones que los municipios tienen depositados en el BGF podrían ser contabilizados como parte del dinero en caja del banco, obviando que ese dinero les pertenece a los municipios.
“El fideicomiso debería aparecer en el estado financiero de banco y no aparece, con su propia identidad", señaló el director ejecutivo del CRIM, Víctor Falcón.
Explicó que actualmente los fondos de los municipios aparecen junto al resto del dinero del banco y eso “lo que podría ocasionar es que pondría en riesgo los fondos de los municipios”.
La ley que creó el CRIM ordena la creación de un fideicomiso con el BGF. La Junta de Gobierno del CRIM afirma que ese paso no se ha dado.
No obstante, el BGF aseguró que el fideicomiso se estableció el 21 de octubre de 1997 al firmarse el “Contrato de Fideicomiso”, copia del cual entregó a El Nuevo Día.
La Junta del CRIM, la cual ayer se reunió para discutir las acciones que van a seguir con este reclamo, catalogó el “Contrato de Fideicomiso” como un “acuerdo” que no tiene garantías ni establece la política de in- versión con el dinero municipal.
“Ese documento no tiene los requisitos que rige un fideicomiso”, dijo Márquez, quien destacó que lleva semanas solicitando una reunión con la presidenta del BGF, Melba Acosta , pero no han tenido éxito.
Mientras, el alcalde de Bayamón, Ramón Luis Rivera, hijo, miembro de la Junta del CRIM, destacó que si el BGF fuera declarado insolvente, al no estar constituido el fideicomiso, el dinero de los ayuntamientos pudiera ser utilizado para otros fines.
“En caso de que el Banco Gubernamental tuviera algún problema o se fuera en insuficiencia, el banco tendría que pagar a los acreedores que están en primer orden, pero no tocarían los chavos de los municipios porque están en un fideicomiso que los protege”, dijo Rivera tras finalizar la reunión que la Junta para discutir el tema.
La situación, según el presidente de la Junta, también implicaría que una insolvencia del BGF sin que haya un fideicomiso pondría en jaque las remesas que reciben del CRIM y que los alcaldes utilizan para pagar sus respectivas nóminas.