Se preparan en Guaynabo
Residentes y comercios hacen trámites de cara a la interrupción de agua que inicia este lunes
A pocos días de que inicie el racionamiento de 24 horas en el municipio de Guaynabo, ciudadanos y comerciantes se preparaban comprando galones de agua y cisternas para no carecer del líquido.
La interrupción del servicio de agua iniciará este lunes para 40,000 abonados de Guaynabo, los sectores de Montehiedra en San Juan, y el área de La Morenita en Bayamón.
Estos clientes, que se suplen de la planta Los Filtros en Guaynabo, tendrán agua un día sí y un día no. Los grupos catalogados bajo la Zona Norte no tendrán agua desde las 9:00 a.m. de este lunes, y los de la Zona Sur desde las 9:00 a.m. del martes 7.
COMPRAN AGUA. Antes del mediodía, Gladys Rivera, vecina del sector Buen Samaritano de Guaynabo, no vaciló en visitar el supermercado para comprar dos recipientes de agua de cinco galones y cuatro botellas de un galón. “Yo tengo cisterna en casa, pero compré bastante agua para tomar”, expresó Rivera mientras un empleado del supermercado Amigo montaba los envases en su guagua.
A esta ama de casa no le extrañó que Guaynabo entrara en el plan de racionamiento porque no está lloviendo mucho. “Poco a poco va a llegar el racionamiento a todos los pueblos a menos que Dios haga el milagro”, dijo a El Nuevo Día durante un recorrido.
Eladio Gutiérrez, residente del sector Juan Domingo, también preparó su casa con dos drones de 55 galones, una cisterna de 350 galones, y mucha agua embotellada. De hecho, en la compra que hizo ayer se llevó varias botellas.
“Yo compro mucha agua porque hay que tener agua para tomar, para bañarse, para fregar. Nos estamos preparando bien”, apuntó.
BUSCAN CISTERNAS. Ante la inminente falta de agua, el propietario del negocio Willy’s Pinchos, William Ortiz, salió ayer del local para comprar varias cisternas. “Nos estamos preparando porque lo que más nos va a afectar es el fregado y los baños, y con las cisternas uno puede resolver”, resaltó la administradora del local, Patricia Castellanos. Su mayor preocupación, dijo, es que extiendan el racionamiento a 48 horas, pues será más complicado mantener los baños del local limpios. “No se puede pegar manguera, si no multan. Vamos a ver”, sostuvo.
En el negocio de venta de plantas, Paisajes, la empleada Johanna Maldonado, expresó que, al menos, el vivero tiene cisterna para mitigar el racionamiento, aunque entiende que ese equipo no dará abasto para regar las más de 100 especies de plantas que venden. De hecho, allí mostró que algunas plantas se estaban marchitando por falta de agua.
Por su parte, los negocios de venta de cisternas se están beneficiando del racionamiento. La empresa Solar and Water Solutions en Guaynabo ha tenido un alza en ventas desde hace unos meses, según Margarita Cruz, hija del dueño. Las cisternas de 600 galones son las de mayor salida.