El actor boricua Daniel Irizarry viajará a Turquía para impartir sus conocimientos sobre el surrealismo en las tablas.
Actualmente trabaja junto al guionista José Rivera una versión criolla de la pieza Las Criadas
Con la certeza de que su objetivo como actor es defender el teatro de lo absurdo, el puertorriqueño Daniel Irizarry se trasladará de Nueva York a Ankara, Turquía, el próximo mes de agosto.
Así lo afirmó en una entrevista telefónica desde la ciudad de los rascacielos mientras participaba del retiro artístico Orchard Pro
ject Residency, un taller que contribuye a delimitar la labor escénica. Y al que decidió asistir tras recibir la buena nueva de que fue contratado como profesor de actuación, movimiento y dirección en la Universidad Bilkent de la capital turca.
El primer boricua con maestría en actuación de la Universidad Columbia aceptó la oferta sin titubear. Hasta el momento su intención es aprovechar las oportunidades que le permitan desenvolverse como paladín del surrealismo teatral. Y es que desde sus primeros pasos en la actuación se inclinó por esta técnica actoral que no considera ‘‘común’’.
En las tablas, Irizarry utiliza gestos histriónicos, vestimentas y movimientos corporales pretendiendo que el espectador se sumerja en una realidad alterna. “El público está casi adentro del espacio escénico y acompaña a los intérpretes. Todo es acrobático y conectado con la psicología de los personajes. Algo fuera de lo normal”, explicó añadiendo que las influencias de su mentor, el profesor Niky Wolcz, le impiden que así sea.
Este director teatral lo aproximó a la ciencia biomecánica y a las investigaciones del también director Jerry Grotowski que despertaron su interés en hacer teatro físico, “teatro no tradicional”. “Niky Wolcz, mi profesor en Columbia, me voló los sesos”, resaltó el originario de Santurce.
Por otro lado, talentos locales también contribuyeron a su formación. Tanto Dean Zayas como Rosa Luisa Márquez, José Luis Ramos Escobar, Petra Bravo y Gilda Navarra acentuaron su estilo actoral. “Todo comenzó en el pasillo de drama de la gran Universidad de Puerto Rico (UPR). Con ellos aprendí de todos los tipos de teatro. Tuve la oportunidad de ir a festivales internacionales. Me enamoré del teatro en sí. La visión panorámica que me proveyeron me ha hecho llegar hasta aquí”, subrayó.
Como ejemplo a la filosofía que lleva en su carrera, el graduado del Departamento de Drama de la UPR mencionó su trabajo en UBU, una obra que creó el dramaturgo francés Alfred Jerry para satirizar la sociedad de su tiempo. En la misma se utilizó el término “patafísico” para referirse a un mundo donde lo irrazonable es lo verdadero, donde también existe la excepción de la excepción. De esta manera, los espectadores viven una experiencia diferente.
Irizarry visitó la Universidad Folkwang en Alemania para dirigir una propuesta teatral y el decano de la universidad turca –quien estaba de visita- quedó prendado de su modo artístico revolucionario. “Él estaba y me vio. Rápido me preguntó si podía entrevistarme, le encantó mi trabajo y me hizo una oferta a tiempo completo. Estaré allá todo el año académico”, sostuvo el actor.
Seguidamente, Irizarry abundó sobre por qué aceptó la oferta. La necesidad de alargar su agenda de contactos lo obligó, y más cuando los costos de vida en la Gran Manzana van en ascenso. “Uno de los problemas que uno tiene en Nueva York es conseguir espacios gratuitos para ensayar. Por el momento el único lugar que tengo es uno de los primeros teatros hispanos de la ciudad, el International Arts Relations, Inc (INTAR, Inc.). Allí conocí artistas que me conectaron con el famoso guionista José Rivera”.
De ese encuentro con el nominado al premio Oscar por el guión de la película The Motorcycle Diaries (2004) surgió el nuevo proyecto de Irizarry, que debe quedar listo antes de irse al país transcontinental. Se trata de una adaptación de la icónica pieza
Las Criadas del dramaturgo francés Jean Genet, en la cual ambos –Irizarry y Rivera- trabajan actualmente. La pieza teatral sitúa las acciones de ‘‘Claire’’ y ‘‘Solange’’ en la Isla Nena, en el año 1941, ya que la trama girará en torno a la invasión de la marina estadounidense.
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Quince de estas páginas serán actuadas con escenografía y efectos visuales este mes. Será una presentación tipo ensayo abierto como prueba final de la residencia artística. Ésta mostrará de qué consta la propuesta para tratar de conseguir mayor respaldo para la compañía que preside el joven boricua: “One-Eight Theatre”.
En esta nueva obra se acentuará la colaboración de Rivera e Irrizarry, quienes trabajaron previamente en UBU y Teach Tea
cher Teachest creando un vocabulario escénico alejado de lo tradicional. “En un mundo donde izquierda es derecha y derecha es izquierda, crear un vocabulario en escena es positivo. Al igual que destruir los efectos de la gravedad para sorprender y cautivar. Pero más que eso, si queremos realmente comenzar una sociedad sin racismo ni prejuicios hay que eliminar el lenguaje. Es un reto quijotesco, pero estoy listo”, afirmó justo cuando el tiempo de descanso había finalizado.
Irizarry debía volver a las tablas a jugar a ser quien no es. No obstante, no se despidió sin antes invitar a los amantes de lo ilógico y surrealista al estreno de su versión de Las
Criadas en otoño del 2016. Aún no tiene fecha exacta de la puesta ni el lugar de presentación, pero no duda que “se hará”.