Brutal recorte en fondos de Rehabilitación Vocacional
La ARV anunció un fuerte recorte en la compensación que reciben sus participantes para ayudar a pagar sus gastos de matrícula
La Administración de Rehabilitación Vocacional (ARV) redujo en un 40% la compensación para el pago de matrícula de los participantes de su programa de adiestramiento.
Uno de los afectados con el recorte, que solicitó no ser identificado por temor a represalias, explicó que esta situación “probablemente logre que tenga que renunciar a mi meta educativa”.
La determinación de reducir la compensación obedece a la merma en el presupuesto que el gobierno central les asigna, lo que a su vez afecta el pareo con los fondos federales, explicó ayer Iván A. Clemente Delgado, administrador de Rehabilitación Vocacional.
Mientras los fondos de la ARV han ido en picada, la cantidad de solicitudes de ayuda y el número de beneficiarios del programa aumentaron, añadió el funcionario.
A esa situación se sumó una enmienda a la ley que los obliga a reservar el 15% de su presupuesto para los servicios del programa de preempleo, directriz que se implementó en julio de 2014.
El participante afectado indicó que el beneficio le ayudaba a cubrir el 100% del costo de la matrícula y dijo que con la reducción no tendrá dinero para completar sus gastos.
“Yo, como miles de estudiantes de diferentes instituciones educativas, tendremos que considerar la idea de llevar este caso al tribunal federal”, señaló. “Esta medida se considera injusta y un atropello a los jóvenes especiales”, indicó.
“El gobierno y las agencias al tomar estas decisiones me dejan pensando que les parece mejor que seamos personas mantenidas que personas productivas”, expresó el participante.
Clemente Delgado aseguró que lo máximo que otorgaban a los participantes de este programa era un 60% del costo total de la matrícula y no un 100%. “Nunca hemos aportado la totalidad”, dijo.
La reducción en la compensación afecta directamente el costo total de la matrícula no así los beneficios que paga la administración por servicios complementarios como manutención, asistencia tecnológica, lectores para ciegos e intérpretes para sordos.
La ARV es una agencia que ofrece asistencia a la población con impedimentos o condiciones de salud para que logren obtener un empleo. Entre los servicios que ofrece se encuentra el pago de preparación académica o cursos vocacionales.
EL SEGUNDO DOLAR. Clemente Delgado explicó que el beneficio que se redujo, al que también llamó “el segundo dólar”, es un complemento a las becas que la mayoría de los participantes reciben. “Nosotros cubrimos lo que la beca no cubre”.
La Comunicación Normativa 2016-04, que la ARV envió el pasado 14 de julio a todos los participantes del programa, establece como ejemplo que si el costo de la matrícula es de $8,500 y la beca federal le cubre $2,700, la ARV aportará el 40% de la cantidad que la beca no cubrió.
El documento también establece que en los casos en que el costo de la matrícula sea de $8,500 y el participante no reciba alguna beca, la ARV cubriría el 40% de dicha cantidad.
“Los beneficios de becas u otros programas de asistencia económica que reciba el consumidor serán considerados para el pago total o parcial de matrícula, libros, materiales de adiestramiento, manutención, hospedaje y trasportación”, reza el documento.
A BUSCAR OTRAS AYUDAS. La Comunicación Normativa pide a los beneficiarios del programa que recurran a solicitar otras ayudas como la Beca legislativa, Oportunidades Educativas (SEOG), y Servicios Comparables y Beneficios.
“La ARV no auspiciará el servicio de adiestramiento en su totalidad, ya que el consumidor tiene que realizar el máximo esfuerzo para utilizar los recursos de los diversos programas de asistencia económica disponible en las instituciones universitarias”, advierte dicha comunicación, también identificada como Procedimiento para Recomendar el Servicio de Adiestramiento.
Clemente Delgado explicó que del 2012 al presente, el presupuesto de la ARV se redujo de $88 millones a $79 millones, de los cuales utilizan alrededor de $37 millones para ofrecer servicios.
El administrador indicó que para poder lidiar con la reducción del presupuesto tuvo que cancelar $9 millones en contratos y redujo en un 50% la contratación del personal de confianza, entre otras medidas.
“A pesar de todas las economías tuvimos que tomar esta decisión. Esto es el resultado de una evaluación exhaustiva y la reducción de los proyectos de la agencia”, dijo.
El servicio de adiestramiento, precisó, tiene este año 32,115 participantes, lo que representa 11,406 adicionales a los que tenía el pasado año.
“Ante el aumento vertiginoso de consumidores y la disminución en presupuesto, buscamos tratar de beneficiar a la mayor cantidad de consumidores”, insistió Clemente Delgado.