El reto de un nuevo enfoque
El Departamento de Educación y la Oficina de la Procuradora de la Mujer no coinciden en torno al contenido del nuevo currículo de equidad de género
En momentos en que diversos sectores de la sociedad coinciden en la importancia de implementar estrategias en las escuelas que permitan fortalecer la enseñanza de conceptos como la equidad y la no violencia, el proceso para establecer en un currículo de equidad de género en el sistema público de enseñanza ha resultado ser un reto.
La agenda para llevar a las aulas un nuevo enfoque que destaque la equidad entre los géneros está atrasada y al momento se desconoce cuándo estará listo, reconoció el subsecretario de Asuntos Académicos del Departamento de Educación, Harry Valentín.
El Departamento de Educación ya trabajó lo que llaman los módulos -que son el conjunto de todas las actividades y estrategias diseñadas para un tema- que usarían los maestros para incluir la equidad de género en todas las materias y todos los grados dentro del sistema.
No obstante, lo que salió de la agencia no cumple con las expectativas de expertos en pedagogía, derechos humanos, trabajo social y estudios de género, entre otros, convocados por la Oficina de la Procuradora de la Mujer para evaluar el currículo, señaló la procuradora, Wanda Vázquez.
Así las cosas, el currículo no podrá ser utilizado en las escuelas hasta que se atiendan los señalamientos que han hecho los miembros del comité creado por la procuradora.
“Hay unos problemas con los módulos porque perpetúan los mismos estereotipos que la educación en equidad de género busca romper. Perpetúa el concepto de la familia tradicional que están engranada donde es mamá, papá e hijos, sin reconocer que hay diversidad de familias: mamá sola con sus hijos, papá solo con los hijos, niños con sus abuelos, mamá con su nuevo compañero y los niños... Además, mantienen un lenguaje sexista”, explicó la procuradora.
LA PRISA, LA PRINCIPAL ENEMIGA. El tema del currículo en equidad de género se ha estado trabajando en el Departamento de Educación desde octubre de 2014, sostuvo Valentín. En ese momento, la agencia trabajó con diversos grupos para confeccionar la carta circular que establecería la política pública sobre cómo se incluiría esta enseñanza de manera transversal en los currículos de todas las materias y todos los niveles, indicó el ayudante especial del subsecretario de Asuntos Académicos, Edwin Bonilla.
Una vez se firmó la carta circular, la creación de los módulos estuvo a cargo de facilitadores de materia y maestros, señaló Bonilla.
“Ellos son los expertos en currículo”, expresó Valentín.
El subsecretario indicó que los documentos estuvieron listos en verano. Estos se entregaron a la Oficina de la Procuradora de la Mujer el 14 de julio, detalló Vázquez.
“Llegaron con el comentario que se esperaba que los evaluara para el inicio del semestre, o sea, en dos semanas. Yo, responsablemente, no podía hacer una evaluación real de esto en ese periodo, principalmente porque no soy experta en pedagogía ni en cómo integrar la equidad de género a los currículos. Éste es un tema de suma importancia para el país y no se puede hacer con prisa”, manifestó Vázquez.
Con varios de los módulos en mano, la procuradora explicó que convocó a un grupo de diez profesionales que se han reunido desde julio para evaluar los documentos. Al terminar su primera reunión hicieron un listado de 12 señalamientos en torno a los módulos, los cuales van desde identificar errores gramaticales ortográficos en los documentos hasta señalar problemas de contenido.
Por ejemplo, el módulo de bellas artes -al cual este diario tuvo accesocontiene una sección de definiciones, en la cual se definen los derechos humanos como “conjunto de privilegios”.
“¿Cómo tu vas a decir que los derechos humanos son privilegios? No, no lo son, es una definición incorrecta. Y estos son ejemplos de que quizás, por la prisa, no se le prestó atención a unas cosas”, sostuvo Vázquez.
Asimismo, los módulos trabajados por Educación perpetúan el lenguaje sexista que utiliza sustantivos masculinos en plural para referirse a ambos géneros, por ejemplo, niños o maestros cuando se habla a niños y niñas o maestros y maestras. Esto, en un documento que se supone busca elimi- nar los estereotipos, no es aceptable, señaló el director ejecutivo de la Comisión de Derechos Civiles, Ever Padilla. Este fue parte del comité creado por la Oficina de la Procuradora de la Mujer.
“Si vas a crear algo para enseñar equidad de género es para ‘desaprender’ y aprender cosas nuevas, así que no puedes hacer eso utilizando los mismos conceptos”, estableció Padilla, quien señaló que una nota aclaratoria al inicio de cada módulo que detalla que los sustantivos masculinos hacen referencia a ambos géneros no es suficiente para subsanar esta falla.
ENFOCADA EN UNA LEY. El propósito de establecer un currículo en equidad de género en las escuelas públicas es crear la base para una sociedad donde se eliminen las nociones de que un género está por encima del otro, ideas que en nuestra cultura favorecen atribuir características de fuerza y poder a lo masculino y sumisión y obediencia a lo femenino. Esto desemboca en expresiones de violencia, par-
ticularmente la violencia de género cuando en una relación el hombre entiende que debe tener el control sobre su pareja, explicó la directora ejecutiva del Proyecto Matria, Amárilis Pagán.
A través de la educación en equidad de género, se le enseña a los niños desde los primeros grados que todos tienen los mismos derechos y el mismo valor, sin importar su género, destacó Vázquez. Con ejercicios tan sencillos como hacerles ver -a través de juegos y disfraces- que no hay profesiones atadas al género y que tanto niñas como niños pueden ser enfermeros, mecánicas y doctores, se logran eliminar ideas que perpetúan estereotipos que causan daño, indicó la procuradora.
“Una niña debe crecer desde chiquita sabiendo que puede estudiar lo que ella quiera; que puede vestirse de azul, no tiene que ser de rosa; que puede tener el pelo corto, o lo puede llevar largo; que ella tiene tantos derechos como los niños... También tenemos que eliminar esos estereotipos en tor- no a los niños, (a los) que se les dice que los hombres tienen que ser rudos, fuertes, esas cosas que los niños no lloran, que eso es cosa de nenas, todo eso perjudica al hombre. Para que seamos una sociedad libre de prejuicios y que se creen relaciones saludables entre las personas tenemos que enfocarnos en la equidad de género”, manifestó Vázquez.
En lo que va de año, seis mujeres han muerto a causa de la violencia de género, indicó la procuradora.
La creación e implementación de un currículo en equidad de género en las escuelas públicas fue ordenado mediante la Ley 108 de 2006. El estatuto establece que el currículo debe ser desarrollado por el Departamento de Educación, en coordinación con la Oficina de la Procuradora de la Mujer, por lo cual Vázquez aseguró que los módulos no se podrán utilizar hasta que no cuenten con su aval.
ENTRENARÁN MAESTROS. El subsecretario de Asuntos Académicos reiteró que el currículo en equidad de género no consistirá de una clase en educación sexual ni se adquirieron libros específicos para su enseñanza. A inicios de año, la difusión de imágenes de textos con contenido sexual a través de las redes sociales provocó el rechazo de sectores conservadores, que aseguraban que eran los materiales que usaría el Departamento de Educación.
“Hemos trabajado con lo que es la alineación, para que el tema de la equidad de género fluya con el currículo general de todas las materias. Tenemos especialistas de currículo que evaluaron las unidades curriculares y se determinó en qué momento es que se integrarán las actividades de equidad de género”, sostuvo Valentín, quien destacó que los maestros recibirán adiestramientos así como nuevos mapas curriculares para que puedan llevar esto al salón de clases.