CÓMO LE HABLAS
Comunicación que rinde frutos
Has contado cuántas veces al día le dices NO a tu perro. Estoy segura que muchos perros entienden más la palabra NO que su propio nombre o muy probable entienden que su nombre es NO.
La pregunta es: ¿Qué le estas enseñando a Fido cuando le dices no? Te hace caso cuando se lo dices ? Al principio de mis cursos le pregunto a mis clientes, que quieres enseñarle a tu perro?
La mayoría me dice “pues los comandos básicos, que haga las necesidades en un solo lugar y que entienda cuando le digo NO”. Hay muchas escuelas de entrenamiento para perros pero hasta el momento no he visto ninguna que se llame No, No, No Dog Training.
La mayoría de las personas esperan que los perros respondan o dejen comportamientos indeseados cuando se les dice NO pero no le enseñan lo que esperan de ellos.
Decirles NO es una palabra más que el perro escucha a diario y realmente no entiende lo que significa. Sabe que muchas veces viene acompañado de un grito, ruido o en ocasiones golpes pero al rato vuelven y hacen lo mismo que no deben.
Cuando el perro hace cosas que nosotros no queremos, como morder, ladrar o hacer necesidades fuera de lugar es porque no se les ha enseñado lo que esperamos de él y está actuando según su instinto le indica.
Le decimos no pero realmente no le enseñamos nada. Le pedimos que deje de hacer algo pero no le decimos lo que puede hacer en vez. Los perros están hechos para trabajar. Si le enseñamos algunos comandos, podremos entonces sustituir la acción indeseada por los comandos que ya conoce o podemos sustituir lo que está mordiendo por un juguete que sea adecuado para él.
UN RETO. Les propongo el siguiente reto esta semana:
Saca un día para enseñarle el comando de sentarse a tu perro. Cada vez que le digas “Sit” y lo haga, dale una golosina, un sobito o alguna recompensa. De ahora en adelante para recibir algo a cambio el perro tiene que sentarse. ¡Nada gratis! Antes de comer, antes de salir a pasear, cuando tu entres por la puerta... para todo “Sit”. Repite el comando a diario hasta que llegue a sentarse antes de que se lo digas.
Por una semana completa evita utilizar la palabra NO. Cuando vayas a utilizarla mándalo a sentar en vez o dale un juguete adecuado para él. Te sorprenderá el cambio.
La autora es entrenadora de perros en Lucky Pet. Para más información visita www.luckypetpr.com. Si tienes preguntas relacionadas al comportamiento de tu perro, puedes escribir a luckypet@gmail.com o a Facebook.com/luckypetfanpage